El Departamento de Agricultura, Ganadería y Medio Ambiente del Gobierno de Aragón ha ordenado el sacrificio de los 92.700 visones de una explotación de La Puebla de Valverde (Teruel), cuyo titular es Secapiel S.L., al dar algunos ejemplares positivo en la prueba de COVID-19.
La Dirección General de Calidad y Sanidad Alimentaria inmovilizó de forma cautelar la granja el pasado 22 de mayo, cuando siete de sus trabajadores dieron positivo por COVID-19 y desde entonces ha realizado un seguimiento a los animales, sin permitir la entrada ni salida de ejemplares –ni subproductos– de la explotación, ha señalado Olona en rueda de prensa.
No obstante, el Departamento comprobó que la empresa cumplía con todos los requerimientos en materia de sanidad animal y se comunicaron las medidas relacionadas con la bioseguridad a seguir, que "nos consta que se han venido cumpliendo", ha indicado Olona.
Los primeros test se realizaron el 28 de mayo y siguiendo el protocolo establecido por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, se seleccionó una muestra aleatoria de siete animales a los que se les realizó un test de RT-PCR en el Laboratorio de Referencia Nacional de Diagnóstico de Enfermedades en Animales del Ministerio, situado en Algete (Madrid). Los resultados se conocieron el 3 de junio y fueron negativos.
El Gobierno de Aragón mantuvo la inmovilización y continuó con el seguimiento de los animales en la explotación, de manera que el 8 de junio se realizó un segundo muestreo, tomando 20 muestras de sueros e hisopos orofaríngeos, rectales y exudados de órganos internos, resultando un caso positivo no concluyente frente a SARS-CoV-2, ante lo que el Departamento decidió seguir realizando pruebas en la explotación.
El 22 de junio se realizó un tercer testeo en el que se seleccionó una muestra aleatoria de 30 ejemplares. Los resultados confirmaron cinco positivos, lo que equivale al 16% de la muestra seleccionada. Con estos datos "está plenamente justificada la inmovilización".
Antes de tomar una decisión que supondría "un grave perjuicio económico" para el titular de la explotación, el Departamento de Agricultura ordenó un cuarto muestreo a 90 ejemplares, que se realizó el 7 de julio. Los resultados, que se han conocido este mismo lunes 13 de julio, determinaron 78 positivos, el 86,67% de la muestra.
Evitar riesgos a la salud pública
Tras los resultados "concluyentes" obtenidos, el Gobierno de Aragón ha establecido como medida preventiva el sacrificio de los 92.700 visones que actualmente existen en la explotación, "si bien, durante este tiempo no se ha detectado un comportamiento anómalo en los animales ni se ha producido un incremento en la mortalidad en los mismos".
"Tenemos la absoluta certeza de que el virus está presente en estos animales y se está produciendo la transmisión comunitaria entre los animales", ha recalcado el consejero, quien ha dejado claro que "el único propósito" del sacrificio es "evitar riesgos a la salud pública".
La orden de sacrificio será ejecutada directamente por el propio Departamento de Agricultura, con el apoyo de la empresa pública SARGA y "adoptando todas las medidas de bioseguridad necesarias", ha agregado Olona.
El sacrificio obligatorio se ha ordenado en aplicación de lo establecido por la Ley de Sanidad Animal, que contempla la indemnización, "a cuyas disposiciones y previsiones es preciso remitirse".
"El Departamento de Agricultura, Ganadería y Medio Ambiente no puede determinar si existe transmisión de humanos a animales o viceversa", pero "caben las dos posibilidades, que se haya producido en una dirección o en la otra", insistiendo el consejero en que "son hipótesis de trabajo que no podemos confirmar en estos momentos".