Asaja Alicante ha calificado este día como "de luto" por la "muerte" del trasvase Tajo-Segura y ha asegurado que su recorte tendrá "drásticos efectos para la población".
Así se ha pronunciado la organización agraria después de que el tercer ciclo de planificación hidrológica española, que regirá hasta el 31 de diciembre de 2027 y que prevé la reducción del trasvase Tajo-Segura, se haya publicado en el Boletín Oficial del Estado (BOE) y entre este sábado en vigor.
Se aprueba la revisión de los planes hidrológicos
Al respecto, Asaja Alicante lamenta que "el propósito del presidente de España, Pedro Sánchez, y de la ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, de acabar con el trasvase Tajo-Segura hoy se haya hecho realidad".
"Así queda certificado con la publicación en el BOE del Real Decreto 35/2023, de 24 de enero, por el que se aprueba la revisión de los planes hidrológicos, entre los que se encuentra el del Tajo, con el controvertido aumento de los caudales ecológicos, lo que se traduce en un drástico recorte en las transferencias de agua que llegarán al Levante procedentes del trasvase que superarán los 100 hectómetros cúbicos anuales", han expuesto.
Para el presidente de la entidad, José Vicente Andreu, "hoy es un día de luto para la provincia de Alicante y el sureste español, porque hoy el Gobierno ha materializado su propósito de arruinar a la agricultura del Levante, con los daños colaterales que esto va a suponer para sectores que dependen de forma directa e indirecta del agrícola, como el industrial, el turístico y la clara puesta en peligro de la calidad del agua de boca".
La muerte del trasvase Tajo-Segura
"Hoy es un día de duelo por la muerte del trasvase Tajo-Segura y lo que ello conllevará: drásticos efectos para la población, el empleo, la economía de nuestras familias, efectos medioambientales, turísticos... que en primera instancia afectarán al Levante, pero que, a medio plazo, también se harán notar en el conjunto del Estado", ha augurado.
Finalmente, Asaja Alicante lamenta que el Gobierno siga intentando "engañar a la opinión pública, de cara a las próximas elecciones, para justificar el tijeretazo del trasvase, sin aval científico-técnico, con proyectos que prometen la inyección de agua desalada".
"Una alternativa --recalcan-- inviable por su alto coste económico y ambiental, solo apta para usos puntuales, e inaceptable técnicamente como solución definitiva al déficit hídrico estructural de nuestra zona, que desde hoy se verá agravado considerablemente".