El 33% de las Áreas Importantes para las Aves en España están amenazadas por las aguas residuales, un asunto por el que la Comisión Europea ha llevado a España al Tribunal Superior de Justicia de la UE en dos ocasiones por no asegurar la depuración adecuada de estas, de modo que la sanción asciende a 46,5 millones de euros y cada día se paga 171.217 euros al día por incumplir la normativa europea, hasta que se adopten medidas.
Según recuerda SEO/BirLife, con motivo del Día Mundial del Agua, además del perjuicio para las arcas públicas, el impacto negativo de este problema afecta también a la salud humana y al medio ambiente.
La ONG advierte también de que las poblaciones de aves del 33% de las Áreas Importantes para la conservación de las Aves de España (IBA en sus siglas en inglés) están amenazadas, de forma alta o muy alta, por las aguas residuales.
Además, denuncia que en algunos de los humedales de mayor valor ambiental del país se producen vertidos ocasionales, aguas residuales domésticas y urbanas, efluentes industriales, agrícolas y ganaderos, lo que les afecta de forma "preocupante".
Así, pone de ejemplo humedales que están en esta situación a la ría de Eo, las marismas de Santoña, la albufera de Valencia, El Hondo-Carrizales de Elche, el Mar Menor, las marismas del Guadalquivir, las Tablas de Daimiel o los embalses del Vicario, Gasset y Navas de Malagón, entre otros.
El responsable de aguas de la organización ambiental, Roberto González, ha advertido de que la situación que describen los datos de SEO/BirdLife "es imprudente y preocupante para el bienestar de los ciudadanos y la conservación de la biodiversidad".
"Reclamamos a las administraciones la completa erradicación de los vertidos de aguas residuales sin depurar, especialmente en aglomeraciones urbanas pequeñas y medianas, y solicitamos el incremento de las exigencias respecto a las concentraciones de contaminantes de las aguas depuradas que se vierten ecosistemas acuáticos que puedan verse amenazados", añade.
Humedales en punto de “no retorno”
Entre las situaciones más graves, la ONG subraya la "gravedad del problema" en aquellos humedales que podrían entrar en un punto de "no retorno" como son La Albufera de Valencia, el Delta del Ebro y Doñana y exige a los responsables políticos acciones concretas y urgentes para estos tres espacios que eviten una situación irreversible.
Respecto a la escasa reutilización de las aguas depuradas en España, que solo llega al 10%, considera que España no se puede permitir desaprovechar todo el potencian de los cerca de 5.000 hectómetros cúbicos de agua que se depuran al año en las aproximadamente 3.000 plantas depuradoras.
En concreto, propone que estas aguas se reutilicen en usos industriales, riego de espacios verdes urbanos, limpieza de zonas urbanas o el uso agrícola.
"Este último es de especial importancia porque implicaría reducir la presión que ejerce esta actividad sobre los ecosistemas acuáticos: el regadío supone más del 70% del agua que se gasta en España", indica González que añade que aprovechar estas aguas en agricultura podría tener un impacto positivo en la agricultura y en las áreas importantes para las aves que dependen del agua y que están bajo sobreexplotación o falta de caudales ecológicos.