El actor español Javier Bardem pidió ayer desde la emblemática plaza Times Square de Nueva York la aprobación de un Tratado Global de los Océanos al tiempo que, en una de las célebres pantallas de la plaza, se han proyectado imágenes de las amenazas que acechan a la vida marina.
Ayer comenzó en la Organización de Naciones Unidas (ONU) la tercera de las cuatro rondas de negociaciones hacia un tratado que establezca un ‘Acuerdo de París de los océanos’ legalmente vinculante. Tras su paso por Times Square, Bardem acudió a la sede de la ONU para dirigirse directamente a los delegados/as de los distintos gobiernos y exigirles un sólido Tratado Global de los Océanos que ayude a proteger al menos el 30% de los mares del mundo para 2030.
“Lo que ocurra durante esta conferencia tendrá un profundo impacto en la vida de nuestros océanos y en el futuro de la humanidad. Los gobiernos deben saber que el mundo está mirando mientras negocian un Tratado Global de los Océanos. Simplemente no podemos permitirnos el lujo de equivocarnos”, afirmó Bardem.
El evento en Naciones Unidas comenzó con la proyección del tráiler del documental Sanctuary, del director español Álvaro Longoria, sobre su viaje a una de las zonas más remotas de alta mar que necesita protección urgente: el Mar de Weddell, en la Antártida. Bardem, que produjo el documental y también participó en esta expedición, compartirá su experiencia personal y realizará un llamamiento a los/as líderes mundiales para que eleven sus aspiraciones de proteger el planeta.
También ayer lunes, Greenpeace, la High Seas Alliance y la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza instalaron, junto a la sede de las Naciones Unidas, una gigantesca obra de arte inspirada en el océano. La escultura, de ballenas y tortugas, se alza a casi seis metros de altura y representa las numerosas amenazas que enfrentan actualmente los océanos, desde la contaminación por plásticos hasta las prospecciones de petróleo. Además, integradas en ella, hay varias pantallas de vídeo desde las que personas de todo el mundo piden a los gobiernos que hagan historia al aprobar un ambicioso Tratado Global del Océano.
En declaraciones desde Naciones Unidas, Pilar Marcos, responsable de la campaña ‘Protege los Océanos’ de Greenpeace, señaló que “Necesitamos un cambio radical en la forma en que gestionamos nuestros océanos. Confiar en los marcos legales existentes no es suficiente. Y éste es particularmente el caso de las áreas que están más allá de la jurisdicción nacional, ya que se encuentran entre las menos protegidas de nuestro planeta".
"Estas negociaciones son la mejor oportunidad que tenemos para cambiar el statu quo y adoptar un sólido tratado que otorgue una protección efectiva a través de una red de santuarios marinos totalmente protegidos. Dicha red, según la comunidad científica, debe cubrir al menos un tercio de los océanos del mundo para 2030 si queremos defender su valiosa biodiversidad, luchar contra la crisis climática y proporcionar seguridad alimentaria a miles de millones de personas en todo el mundo”, añadió.