La Unión Europea ha aprobado formalmente este martes la nueva normativa sobre producción y etiquetado de productos ecológicos, que entrará en vigor el 1 de enero de 2021 y cuyo objetivo es modernizar la legislación en vigor e impulsar el desarrollo sostenible de la producción ecológica en el bloque comunitario.
Los gobiernos de los Veinticoho han dado este martes el último paso para aprobar la nueva legislación, que ya recibió el respaldo del Parlamento Europeo en la sesión plenaria que se celebró a mediados de abril.
Otros objetivos de la nueva normativa son garantizar una competencia justa entre agricultores y otros operadores del sector, prevenir el fraude y las prácticas desleales e incrementar la confianza de los consumidores en los productos ecológicos.
La Eurocámara y el Consejo de la UE –las dos instituciones que ostentan el poder legislativo en el bloque comunitario– llegaron a un acuerdo preliminar sobre las nuevas reglas a finales de junio del año pasado.
En virtud de las nuevas normas, las importaciones de productos ecológicos tendrán que cumplir exactamente con los mismos estándares que existen en la UE, mientras que eliminarán progresivamente las reglas de equivalencia que permiten a terceros países exportar al bloque comunitario cumpliendo normas similares pero no exactas.
Prevención contra la contaminación de pesticidas
Por otro lado, los productores estarán obligados a aplicar medidas preventivas para evitar la contaminación de sus productos mediante el uso de pesticidas. Aquellos productos de los que se sospeche la presencia de un pesticida no autorizado no podrán ser etiquetados como ecológicos. Asimismo, si la contaminación ha sido deliberada o el agricultor ha fallado al introducir medidas preventivas, se perderá el estatus ecológico.
Además, los Estados miembros que aplican actualmente umbrales para las sustancias no autorizadas en alimentos ecológicos podrán seguir haciéndolo si permiten que los alimentos ecológicos de otros países que cumplen con las normas europeas accedan a sus mercados.
Finalmente, para impulsar la producción de alimentos ecológicos, las nuevas normas pretenden incrementar la oferta de semillas y animales ecológicos, permitirán la existencia de granjas "mixtas" que se dediquen tanto a la agricultura convencional como a la ecológica siempre que separen "claramente" dichas actividades y facilitarán la autorización para pequeños productores.