Un iceberg gigante bautizado como A74 se ha desprendido el 26 de febrero de la Antártida, 10 años después de los investigadores detectaran la primera grieta.
La masa de hielo tiene la un tamaño de 1.270 quilómetros cuadrados, lo que equivale a toda la superficie del área metropolitana de Londres o 12 veces la de la ciudad de Barcelona.
La plataforma de hielo Brunt ya ha sufrido eventos similares, ya que se trata del tercer desprendimiento que se produce en una década. La masa helada desprendida en el continente antártico tiene un grosor de 150 metros.
Este envento recuerda a otros que se han producido recientemente el del iceberg gigante A-68A en el Océano Atlántico Sur o Larsen C que acabó desintegrándose.
La British Antarctic Survey (BAS) se dedica a la investigación científica de la Antártida, y algunos de sus investigadores fueron los primero en detectar la el crecimiento de varias grietas. Los científicos de la BAS esperaban el evento desde hace 10 años y no temen por la estación de investigación Halley, ya que hace tiempo que tomaron precaucionesque y la desplazaron 32 quilómetros de la zona donde se detectó la primera grieta.