El Tribunal de Apelación de Inglaterra (Court of Appeal) ha declarado que la ampliación del aeropuerto de Heathrow es ilegal porque el Gobierno de Reino Unido no tuvo en cuenta el Acuerdo del Clima de París. Tras la lectura de la sentencia, el Gobierno ha aceptado la sentencia y ha anunciado que no apelará.
Con esta decisión, es probable que la expansión del aeropuerto londinense no pueda seguir adelante ya que el segundo tribunal más alto de Reino Unido ha señalado que el Ejecutivo no tuvo en cuenta sus compromisos bajo el Acuerdo de París.
La decisión no tiene precedentes porque se trata de la primera sentencia que expone que el Acuerdo de París puede ser utilizado en los tribunales. Además, esta decisión podría afectar a otras expansiones en otros aeropuertos del Reino Unido.
En España también se prevé ampliar los aeropuertos de Madrid, Barcelona y Palma de Mallorca y construir un nuevo aeropuerto en Huelva. La sentencia abre la puerta a que el Acuerdo del Clima de París, de obligado cumplimiento para las partes firmantes y España es una de ellas, pueda servir para impugnar estos proyectos.
Para la abogada internacional y participante en las negociaciones del clima de Naciones unidas Farhana Yamin, el juicio "muestra que el espíritu y la letra del Acuerdo de París deben ser respetados y que los gobiernos, empresas e inversores deben ahora urgentemente reevaluar y reconciliar sus planes con el límite de temperatura de 1,5°C".
"Cualquier otra cosa significará que no están salvaguardando el futuro de sus ciudadanos y de sus jóvenes. La decisión del Tribunal de Apelación allana el camino para que el Gobierno del Reino Unido muestre un verdadero liderazgo en la COP 26", ha manifestado.
Por su parte, el exdiputado conservador, y asesor climático de la exprimer ministra Theresa May, Lord Randall de Uxbridge considera que esta es "una oportunidad" para Boris Johnson, que secundó las protestas contra el proyecto antes de ser primer ministro, para dejar a un lado la expansión de Heathrow y centrarse en el evento diplomático más importante de su Gobierno, que será la XXVI Cumbre del Clima que se celebrará en Glasgow (Escocia) a final de año.
"Es su oportunidad de brillar en el escenario mundial. Al elegir aceptar la decisión del tribunal, Boris está enviando una señal de que el Reino Unido puede prosperar sin expandir los aeropuertos o romper nuestros compromisos sobre la crisis climática", subraya.
Por su parte, la jefe de administración en Sarasin & Partners Asset Managers, Natasha Landell-Mills, afirma que la decisión del Tribunal de Apelación "cambia el juego" ya que supone que los Gobiernos ya no pueden hacer "caso omiso" de sus propios compromisos en el marco del Acuerdo de París a la hora de aprobar grandes proyectos de infraestructuras.
"Esta decisión es un paso vital para ayudar a desplazar el capital de las actividades que dañan nuestro clima hacia aquellas que lo estabilizan", añade.
Un tratado vinculante para los firmantes
Finalmente, la profesora adjunta de derecho internacional público de la Universidad de Leiden (Países Bajos), opina que aunque la sentencia se refiere a políticas nacionales del Gobierno del Reino Unido, sus implicaciones son globales. "Por primera vez, un tribunal ha confirmado que el objetivo de temperatura del Acuerdo de París de hacer esfuerzos para mantener el calentamiento por debajo de 1,5º C tiene efecto vinculante", celebra.
De este modo, observa que la decisión del Tribunal de Apelación podría "inspirar litigios similares en otros países que han firmado el Acuerdo de París, pero que convenientemente ignoran su objetivo de temperatura cuando aprueban proyectos de gran consumo de carbono o promulgan políticas de energía sucia".
El desarrollo de la expansión del aeropuerto de Heathrow, un proyecto presupuestado en 16.500 millones de euros, fue una declaración de política nacional votada por el Parlamento, tal y como exige la Ley de Planificación de 2008. Requeriría la adquisición de cerca de cuatro kilómetros cuadrados al noroeste del aeropuerto y el derribo de casi ochocientos edificios y viviendas. Según la empresa que dirige Heathrow, permitiría el tráfico de 756.000 vuelos al año frente a los 473.000 que se realizan en la actualidad
En mayo de 2019, se presentaron al Tribunal Superior cinco revisiones judiciales separadas de la decisión del Gobierno, que fueron desestimadas. Los recursos fueron presentados por el alcalde de Londres, Heathrow Hub Limited, varios distritos de Londres (incluidos Wandsworth y Richmond), Greenpeace, Amigos de la Tierra y la organización benéfica especializada en litigios sobre el clima Plan B.
Un mes más tarde, estas revisiones fueron aceptadas para impugnar la decisión del Tribunal de Apelación. La audiencia se inició en octubre de 2019 y ha terminado este 27 de febrero con la lectura de la sentencia que ha sido aceptada por el Gobierno británico, que ha mostrado su intención de no recurrir, a diferencia de lo expresado por la constructora española Ferrovial, que iba a gestionar los trabajos.