El ser humano ha creado 8.300 millones de toneladas métricas de plásticos desde 1950, año en que comenzó la producción a gran escala de materiales sintéticos, de los cuales aproximadamente la mitad se ha generado en sólo los últimos 13 años.
Esta es una de las principales conclusiones de un estudio, publicado este lunes 17 de julio en la revista Science Advances, realizado por un equipo de científicos de la Universidad de Georgia, la Universidad de California, Santa Barbara y Sea Education Association. Se trata del primer análisis global de la producción, el uso y el destino de todos los plásticos que se han fabricado.
De los 8.300 millones de toneladas de plásticos generados, unos 6.300 millones (más del 75%) ya se habían convertido en residuos para 2015. De esa cantidad de residuos, sólo el 9% se reciclaron, el 12% se incineraron y el 79% se acumularon en vertederos o en el medio ambiente natural.
Los investigadores han determinado que si las tendencias actuales continúan, cerca de 12.000 millones de toneladas métricas de residuos plásticos estarán en vertederos o en el medio ambiente natural para el 2050, una cantidad que equivale a unas 35.000 veces el peso del Empire State.
"La mayoría de los plásticos no se biodegradan en ningún sentido significativo, por lo que los residuos de plástico que los humanos han generado podrían estar con nosotros durante cientos o incluso miles de años", ha señalado la coautora del estudio y profesora asociada de ingeniería, Jenna Jambeck. "Nuestras estimaciones subrayan la necesidad de pensar críticamente sobre los materiales que usamos y nuestras prácticas de gestión de residuos", ha indicado.
Para el estudio, los científicos recopilaron estadísticas de producción de resinas, fibras y aditivos de una variedad de fuentes industriales y los sintetizaron según el tipo y el sector consumidor.
400 millones de toneladas métricas en 2015
La producción mundial de plásticos aumentó de dos millones de toneladas métricas en 1950 a más de 400 millones de toneladas métricas en 2015, según el estudio, superando la mayoría de los demás materiales hechos por el hombre. Las excepciones notables son los materiales que se utilizan ampliamente en el sector de la construcción, como el acero y el cemento.
Mientras que el acero y el cemento se utilizan principalmente para la construcción, el mercado más grande de los plásticos es el empaquetado, y la mayor parte de esos productos se utilizan una vez y se descartan.
"Aproximadamente la mitad de todo el acero que fabricamos va a la construcción, por lo que tendrá décadas de uso, el plástico es lo opuesto", dice por su parte el autor principal del documento y profesor asociado en la Escuela Bren de Ciencias Ambientales y Administración de UCSB, Roland Geyer. "La mitad de todos los plásticos se convierten en residuos después de cuatro años o menos de uso", añade.
"Lo que estamos tratando de hacer es crear las bases para la gestión sostenible de los materiales –afirma Geyer–. Es simple, no puedes manejar lo que no mides, por lo que pensamos que los debates políticos contarán con más información y estarán basadas en hechos ahora que tenemos estos números".
El mismo equipo de investigadores dirigió un estudio en 2015, publicado en la revista Science, que calculaba la magnitud de los residuos de plástico que entraban en el océano. Sus estimaciones eran que ocho millones de toneladas métricas de plástico entraron en los océanos en 2010.
"Hay gente viva hoy que recuerda un mundo sin plásticos –lamenta Jambeck–. Pero se han vuelto tan omnipresentes que no se puede ir a ninguna parte sin encontrar residuos plásticos en nuestro medio ambiente, incluidos nuestros océanos".
Los investigadores son rápidos en advertir que no buscan la eliminación total de plástico del mercado, sino más bien un examen más crítico del uso de plástico y su valor de fin de vida.
"Hay áreas donde los plásticos son imprescindibles, especialmente en productos diseñados para durabilidad", defiende el coautor del estudio, Kara Lavender Law, profesor de investigación en SEA. "Pero creo que tenemos que echar un vistazo cuidadoso a nuestro uso expansivo de plásticos y preguntar cuándo el uso de estos materiales tiene o no tiene sentido", reflexiona.
Una imagen más clara de los plásticos