Cientos de incendios forestales han arrasado al menos tres millones de hectáreas, una superficie equivalente a la de Cataluña, en zonas remotas y deshabitadas de Siberia, que tampoco está escapando a los efectos del calentamiento global y ve como se funde el permafrost, el suelo helado durante cientos o miles de años, lo que abrirá las puertas a la emisión de enormes cantidades de metano a la atmósfera.

Grupos ecologistas como Greenpeace consideran que la cifra real de territorio quemado podría ser mucho peor y alcanzar los cuatro millones de hectáreas, y una serie de personalidades de la cultura, principalmente músicos, grabaron vídeos y enviaron mensajes instando al Gobierno a tomar medidas urgentes.

El primer ministro, Dimitri Medvédev, ha ordenado a los cuerpos policiales que investiguen el origen de los siniestros porque las autoridades temen que se trate de fuegos intencionados destinados a ocultar talas ilegales en la taiga, el que es uno de los mayores bosques del mundo y uno de los grandes pulmones del planeta.

Por su parte, el presidente Vladimir Putin, ordenó el miércoles al Ejército que ayude a los bomberos a hacer frente a la crisis ecológica generada en la parta asiática del mayor país del mundo. Antes de que Putin ordenara que a esta lucha se sumaran los soldados, en la extinción de los incendios participaban casi 3.000 personas con cerca de 400 equipos especializados, incluidos aviones.

"Al examinar el informe del ministro de Emergencias, el presidente ruso, Vladimir Putin, ordenó al Ministerio de Defensa implicarse en la extinción de incendios", informó el Kremlin en un comunicado.

De esta forma, las tropas desplegadas en la provincia de Irkutsk, una de las más afectadas por los incendios, permanecerán en la región hasta nuevo aviso, según ha recogido la agencia rusa de noticias Sputnik.

En respuesta, el Ministerio de Defensa ha anunciado que enviará diez aviones y otros tantos helicópteros a la provincia de Krasnoyarsk para participar en la lucha contra las llamas.

"En las próximas horas, diez aviones IL-76 y diez helicópteros militares equipados con sistemas especiales de vertido de agua se dirigirán a Krasnoyarsk", ha detallado en un comunicado.

Lluvias artificiales

Una de las estrategias empleadas está siendo la generación de lluvias artificiales, que se consiguen disparando contra las nubes cartuchos que contienen iones de plata desde una aeronave Antonov AN-26. Gracias a esta técnica se ha logrado sofocar 8 incendios en la provincia de Irkutsk.

Las autoridades estadounidenses señalaron que el humo de los incendios siberianos ha alcanzado zonas de Alaska y el oeste de Canadá. Mucho antes habían afectado Ulán Bator, la capital de la vecina Mongolia.

Posteriormente, el Kremlin desveló que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, se ha mostrado dispuesto a ayudar a las autoridades rusas en la lucha contra los incendios.

"El presidente de Estados Unidos propuso ayudar a Rusia en la lucha contra los incendios forestales en Siberia", ha dicho la Presidencia rusa, que ha detallado que ambos mandatarios han mantenido una conversación telefónica durante la jornada.

En este sentido, ha resaltado que Putin "ha calificado este paso por parte del presidente estadounidense de un indicio de que en el futuro se logrará restablecer plenamente las relaciones entre los dos países".