Se cumplen 141 días desde el inicio de la guerra de Ucrania desde que el presidente, Vladimir Putin, ordenara la invasión del país.
El Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) estima que más de nueve millones de personas han huido de Ucrania desde el inicio de la ofensiva militar rusa, que considera que ya es el éxodo más rápido en Europa desde la Segunda Guerra Mundial.
“El Kremlin probablemente ordenó a los 'sujetos federales' (regiones) que formaran batallones de voluntarios para participar en la invasión rusa de Ucrania, en lugar de declarar una movilización parcial o total de Rusia", tal como detalla el último informe de Institute for Study of War (ISW) (1).
Además, el ISW destaca que Moscú podría contar con "alrededor de 34.000 nuevos militares para finales de agosto" si cada una de las 85 regiones – incluidas las ocupadas Sebastopol y Crimea– forma al menos un batallón de 400 hombres. Para incentivar este reclutamiento, Rusia estaría ofreciendo contratos de seis meses con salarios de entre 3.750 y 6.000 dólares.
El reporte del think tank estadounidense también recoge que las fuerzas rusas estarían llevando a cabo “ataques terrestres fallidos al norte de Slovyansk y alrededor de Bakhmut”, mientras que continuarían “los ataques aéreos y de artillería alrededor de Siversk y al oeste de la ciudad de Donetsk” y seguirían “los asaltos terrestres limitados y sin éxito al norte de la ciudad de Járkov”.
Juzgar los crímenes de guerra en Ucrania
El fiscal jefe del Tribunal Penal Internacional (TPI), Karim Khan, ha instado este jueves a la comunidad internacional a juzgar los crímenes de guerra en Ucrania al arranque de una conferencia en la ciudad neerlandesa de La Haya.
Khan ha reivindicado que la "legalidad no debe desempeñar un papel secundario" a la hora de abordar el conflicto bélico. "No debe ser un mero espectador", ha insistido.
Por su parte, el ministro de Exteriores, Wopke Hoekstra, ha destacado la necesidad de desarrollar una estrategia común en el marco de la conferencia internacional, que busca impulsar la rendición de cuentas respecto a este tipo de crímenes de cara al final de la guerra.
Así, ha señalado que "es necesario actuar ante el indicio de violaciones, asesinatos y tortura" y ha anunciado que el Gobierno destinará un millón de euros al TPI para reforzar su función.
Mientras, el comisario de Justicia de la Unión Europea, Didier Reynders, ha considerado que juzgar estos crímenes es una "tarea titánica", que requiere un "sistema judicial fuerte" por parte de Ucrania.
Más de una treintena de ministros y fiscales han acudido a La Haya para asistir a la conferencia, que busca plantear diferentes estrategias y 'hojas de ruta' para juzgar crímenes de guerra cometidos en territorio ucraniano tras la invasión de Rusia.
Tras los primeros indicios de violaciones del Derecho Internacional en el marco de la guerra, el TPI abrió una serie de investigaciones y envío al país un equipo de investigadores para recabar pruebas.
Por el momento, la Justicia ucraniana está investigando más de 15.000 posibles casos de crímenes de guerra.
Crisis de refugiados de Ucrania
El Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) (2) estima que más de nueve millones de personas han huido de Ucrania desde el inicio de la ofensiva militar rusa, que considera que ya es el éxodo más rápido en Europa desde la Segunda Guerra Mundial.
Según los últimos datos de ACNUR, 9.152.696 personas han abandonado el territorio ucraniano a 12 de julio de 2022. Por países, 4.608.154 refugiados ya han llegado Polonia, 1.625.231 a Rusia, 949.664 a Hungría, 831.957 a Rumanía, 589.147 a Eslovaquia, 531.869 a Moldavia y 16.674 a Bielorrusia.
No obstante, ACNUR calcula casi 3,5 millones han regresado al país y asegura que ya son más de 5,8 millones los ucranianos que buscan refugio en países de Europa debido a la invasión rusa del territorio.