Se cumplen 250 días desde el inicio de la guerra en Ucrania, después de que el presidente de Rusia, Vladimir Putin, ordenara la ofensiva rusa en el país, el pasado 24 de febrero, denominada por el mandatario ruso "operación militar especial".
El Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) estima que cerca de 14,6 millones de personas han huido de Ucrania, desde el inicio de la ofensiva militar rusa, que considera que ya es el éxodo más rápido en Europa desde la Segunda Guerra Mundial. Es decir, que más del 35,5% de la población –estimada en casi 41 millones en 2021– habría abandonado territorio ucraniano.
Evaluación de la campaña ofensiva rusa
Rusia continuará realizando operaciones militares convencionales hasta bien entrado 2023 en lugar de escalar hacia el uso de armas nucleares tácticas o reducir sus objetivos en busca de alguna de salida
INSTITUTE STUDY OF WAR (ISW)
Según el último informe del Institute Study of War (ISW) (1) pronostica que "Rusia continuará realizando operaciones militares convencionales hasta bien entrado 2023 en lugar de escalar hacia el uso de armas nucleares tácticas o reducir sus objetivos en busca de alguna de salida" además asegura que el Kremlin "considera los plazos de generación y despliegue de la fuerza rusa, los efectos del clima y los esfuerzos de Moscú para congelar a Europa hasta la rendición".
Por otro lado, el ISW también destaca que fuentes rusas afirman que "que repelieron los ataques ucranianos contra Pershotravneve, Tabaivka y Berestove en el óblast de Járkov".
Asimismo, el think tank estadounidense afirma que fuentes ucranianas aseguran "que las fuerzas rusas destruyeron un puente sobre el río Krasna en Krasnorichenske, óblast de Lugansk".
Kiev se queda parcialmente sin agua y electricidad
Las autoridades ucranianas han alertado este lunes a primera hora de que Kiev, la capital del país, se ha quedado parcialmente sin suministro eléctrico y agua potable ante una serie de bombardeos llevados a cabo por las fuerzas rusas contra instalaciones e infraestructuras de "vital" importancia en todo el país.
El alcalde de la ciudad, Vitali Klitschko, ha confirmado las informaciones y ha señalado que "el 80 por ciento de los consumidores no tiene agua potable en la capital" como resultado de los ataques del Ejército ruso, tal y como ha informado a través de su canal de Telegram.
"Los especialistas están trabajando para restaurar el suministro lo antes posible. Actualmente el daño ha provocado que la mayoría no tenga agua potable. Por si acaso, por favor guardad agua siempre que sea posible", ha aseverado.
Así, ha explicado que los sistemas de defensa antiaérea de Kiev ya han sido activados y ha instado a la población a "no entrar en pánico" y protegerse en refugios y lugares seguros. "Estad atentos a las informaciones de las autoridades", ha dicho.
Aunque los sistemas de defensa aérea han logrado interceptar decenas de misiles rusos, las autoridades han alertado de que hay víctimas en la región, donde "continúa la amenaza", según ha recogido la agencia de noticias Ukrinform.
En este sentido, han explicado que los servicios de emergencia ya se han trasladado hasta las zonas más afectadas en un intento por restaurar el suministro eléctrico después de que unas 350.000 viviendas hayan sufrido un apagón y han alertado de que los residentes podrían enfrentarse a un "largo periodo de tiempo" sin luz.
Los bombardeos contra Kiev se enmarcan en la última ola de ataques "masivos" llevados a cabo por las tropas rusas contra las principales ciudades. Las autoridades ucranianas han alertado de que se han registrado explosiones en varios puntos del país, incluida la región de Zaporiyia. En total, 18 instalaciones se han visto golpeadas en una decena de regiones, la mayoría de ellas energéticas.
Las Fuerzas Armadas de Ucrania han cifrado en 44 los misiles interceptados y destruidos, si bien estiman que se han lanzado más de medio centenar en un ataque "simultáneo" contra suelo ucraniano. "Las consecuencias podrían haber sido mucho peores", ha lamentado el primer ministro, Denis Shmihal, según ha recogido la agencia de noticias UNIAN.
Un misil derribado por las fuerzas ucranianas cae en Moldavia
Restos de un misil derribado este lunes por las fuerzas ucranianas han caído en el distrito moldavo de Ocnita, cerca de la frontera común, sin que se hayan registrado víctimas aunque sí algunos daños materiales, principalmente por la destrucción de varias ventanas en viviendas.
Los restos impactaron al norte de la localidad de Naslavcea, junto al río que delimita el territorio entre Ucrania y Moldavia. El Ministerio del Interior moldavo ha confirmado en un comunicado que la zona ha quedado acordonada para evitar posibles riesgos.
Las autoridades ucranianas han explicado a las del país vecino que respondieron a un ataque con drones sobre una presa. El ataque no provocó daños en esta infraestructura, pero sí en los transformadores eléctricos que permiten el correcto funcionamiento de las instalaciones, según el Gobierno moldavo.
El Ministerio de Defensa de Moldavia ya había denunciado este mes que varias aeronaves rusas habían violado el espacio aéreo, supuestamente también durante una serie de operaciones en la zona.
El departamento de Exteriores, por su parte, ha acusado a las fuerzas rusas de violar el Derecho Internacional con sus constantes ataques sobre la infraestructura civil de Ucrania, en particular la energética. Asimismo, ha afirmado que incidentes como los de este lunes acrecientan la inseguridad en toda la zona.
Biden reprochó a Zelenski sus constantes exigencias de ayuda
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, y el de Ucrania, Volodimir Zelenski, mantuvieron en junio una tensa conversación telefónica en la que el mandatario norteamericano llegó a elevar la voz para reclamar a su homólogo que mostrase algo de agradecimiento por la ayuda recibida en lugar de reclamar más constantemente, según fuentes citadas por NBC News.
Biden le dijo entonces que Estados Unidos acababa de autorizar más asistencia militar a Ucrania, por valor de 1.000 millones de dólares, pero Zelenski respondió con un listado de demandas adicionales, lo que aparentemente hizo que el inquilino de la Casa Blanca perdiese los nervios, según las fuentes conocedoras de esta conversación.
El presidente estadounidense defendió entonces la generosidad de su Administración y del Ejército y la población norteamericanas, para acto seguido reclamar más gratitud a su interlocutor, con el que públicamente siempre ha dicho mantener una relación estrecha.
El equipo de Zelenski decidió supuestamente tras esta tensa conversación trabajar para relajar las fricciones y, de hecho, ese mismo día dio las gracias a Washington por la ayuda brindada. Biden, por su parte, reiteró entonces que no dejaría de ayudar a Ucrania "mientras luchan por su libertad".
El presidente de Estados Unidos tiene cada vez más oposición en el Congreso para seguir aprobando fondos hacia Ucrania de forma prácticamente indefinida, en un momento en el que Zelenski reclama más ayuda militar, principalmente sistemas de defensa antiaérea, para hacer frente a los constantes ataques rusos y seguir avanzando en el este.
El interés y preocupación por la guerra de Ucrania entre los ciudadanos estadounidenses también se estaría resintiendo, a tenor de los sondeos. Quienes están muy o extremadamente preocupados por el conflicto han pasado del 55 al 38 por ciento en menos de cinco meses, según una reciente encuesta del Pew Research Center.
Crisis de refugiados de Ucrania
El número de refugiados que han cruzado la frontera de Ucrania hacia el resto de Europa sigue creciendo desde el inicio de la guerra de Ucrania, desencadenada por orden del presidente de Rusia, Vladimir Putin, el 24 de febrero.
El Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) estima que cerca de 14,6 millones de personas han huido de Ucrania, desde el inicio de la ofensiva militar rusa, que considera que ya es el éxodo más rápido en Europa desde la Segunda Guerra Mundial. Más del 35,5% de la población –estimada en casi 41 millones en 2021– habría abandonado territorio ucraniano.
Según los últimos datos de ACNUR (2), 14.591.581 personas han abandonado el territorio ucraniano a 25 de octubre de 2022. Por países, 7.113.589 refugiados ya han llegado Polonia, 2.852.395 a Rusia (a 3 de octubre), 1.628.968 a Hungría, 1.426.392 a Rumanía (a 23 de octubre), 883.374 a Eslovaquia, 670.158 a Moldavia y 16.705 a Bielorrusia (a 24 de octubre).
No obstante, ACNUR calcula que más de 4,4 millones han regresado al país y asegura que ya son más de 7,7 millones los ucranianos que buscan refugio en países de Europa debido a la invasión rusa del territorio.