Hasta 22.180 personas han sido asesinadas, de las que se estima que el 70% son mujeres, niñas y niños, y otras 57.000 han resultado heridas desde el inicio de la guerra en la Franja de Gaza.

Sumario

 

Mientras la situación de la población civil sigue siendo desesperada en su continua huida de los objetivos de los bombardeos israelíes, los ataques de Israel parecen centrarse en tres núcleos principales: al norte la ciudad de Gaza y los campos de refugiados de Jabaliya; en el centro el entorno de Nuseirat; y, al sur, la ciudad de Khan Yunis y Deir al Balah.

 

Mapa de la situación de la ofensiva de Israel en Gaza

 

La situación en la ofensiva militar de Israel en Gaza a 2 de enero de 2024 / Mapa: EA

El conflicto bélico no cesa ni tiene apariencia de hacerlo, golpeando cada vez más zonas de la dañada geografía gazatí. La capital de Gaza sigue sufriendo un ataque sistemático en la búsqueda israelí del desmantelamiento de cualquier huella de la infraestructura y los túneles utilizados por Hamás. La lucha sigue barrio por barrio, golpeando todas las zonas de la ciudad, resultando afectados los hospitales, la zona de la Universidad y todo tipo de edificios.

También han continuado los ataques en el frente sur, que tomó mayor importancia estratégica para Israel en su avance contra la ciudad de Khan Yunis, que los israelíes consideraban como una especie de fortaleza de Hamás.

Pero se ha abierto un tercer frente principal de ataques en una zona que hasta ahora se había visto algo menos golpeada, la franja media de Gaza, más en concreto Nuseirat y sus alrededores. La ofensiva israelí habría partido desde su ubicación en la parte meridional de la ciudad de Gaza y avanzaría en sentido sur por la franja central.

 

La situación humanitaria y el éxodo de la población civil

 

El recrudecimiento de la ofensiva israelí ha provocado un nuevo éxodo de la población que, cada vez que Israel anuncia una ofensiva masiva sobre una zona, se ven obligados de nuevo a huir. Así, Israel volvió a pedir la evacuación de la zona antes de lanzar su ataque generalizado sobre Nuseirat, como ya ha ocurrido en sucesivas situaciones sobre todo tipo de objetivos militares israelíes.

Estas sucesivas huidas sumen, más si cabe, a la población gazatí en el desconcierto y en un continuo éxodo hacia delante, sin poder asentarse en ningún lugar ante el riesgo continuo de sufrir los ataques de Israel. La absoluta falta de infraestructuras y su continua destrucción por los bombardeos tampoco ayuda a la supervivencia de la población civil, sin apenas lugares donde refugiarse, encontrándose con la total destrucción de cientos de miles de viviendas, la gran mayoría de los hospitales destrozados o colapsados y los campos de refugiados también sufriendo las consecuencias de la guerra.

A la falta de un lugar donde poder sobrevivir con dignidad se suma la absoluta falta de materiales de primera necesidad. La llegada de suministros y ayuda humanitaria sigue siendo minoritaria y cada día los gazatíes deben luchar por subsistir y lograr lo necesario para pasar un día más.

 

La cuestión diplomática y los países del entorno

 

Mientras la situación bélica se sigue enquistando, los intentos internacionales de negociación para llegar a un acuerdo que detenga la guerra siguen fracasando. Se han lanzado varias propuestas de acuerdo y desarrollado negociaciones para facilitar la llegada de ayuda humanitaria, pero prácticamente siempre han acabado con un fracaso. El último gran intento fue la propuesta de Egipto de un acuerdo en varias fases que acabara con un alto el fuego, pero éste tampoco salió adelante.

En lo que sí logró cooperar la comunidad internacional fue en la coalición de 10 países que se pusieron de acuerdo para acabar con los ataques hutíes en el Mar Rojo. Los rebeldes siguen con su intención de atacar todos los buques que traspasen el golfo de Adén con dirección a Israel, mientras varios países colaborarán para contrarrestar dichos ataques y hacer más segura la ruta de navegación.

Mientras, en los países del entorno de Israel la situación se sigue tensando cada vez más. Los ataques y fallecidos palestinos en Cisjordania prosiguen con su goteo diario y ya superan las 300 víctimas mortales desde el comienzo de la guerra de Gaza. Además, también continúan las fricciones con los dos países fronterizos del norte. La tensión habitual con Hezbolá ya se ha convertido en una amenaza de intervención en la frontera libanesa si proseguían los ataques de dicha milicia. Y en cuanto a Siria, Israel afirmó golpear varios objetivos militares en su territorio, lo que también supuso una polémica y la protesta iraní cuando un miembro de su guardia revolucionaria falleció tras un ataque israelí.