Cerca de 15.900 personas han sido asesinadas por los bombardeos y casi de 42.000 han resultado heridas en los 43 días de la ofensiva de Israel sobre la Franja de Gaza, de las que 70% son mujeres, niñas y niños, según el Ministerio de Sanidad de Gaza.
Si bien la tregua que apenas duró una semana sirvió para lograr paliar mínimamente las dramáticas condiciones de los gazatíes con la llegada de algunos suministros, el recrudecimiento de las hostilidades vencida la pausa vuelve a dejar a la población civil de Gaza en la más absoluta indefensión ante una guerra que ahora parece extenderse hacia la zona sur de la Franja.
Mapa de la situación de la ofensiva de Israel en Gaza
La situación en la ofensiva militar de Israel en Gaza a 4 de diciembre / Infografía: EA
Con los continuos ataques hacia la ciudad de Gaza y la mitad norte de la Franja, Israel parecía tener sus objetivos casi cumplidos en la zona. Entre esos reiterados ataques, tras los bombardeos que golpearon el hospital Al Shifa que quedó prácticamente abandonado, siguieron otros contra el hospital de Indonesia, también en la zona norte de la Franja y materialmente asediado por las tropas israelíes
Ese asedio se pausó temporalmente por la tregua a la que llegaron ambas partes y válida a partir del viernes 24 de noviembre. Con la mediación de EE UU, Egipto y Qatar, ambas partes acordaron el cese de las hostilidades durante cuatro días, luego prorrogados hasta el jueves 30. Durante este tiempo también se acordó un intercambio de personas, entregándose varios de los rehenes que Hamás mantenía en su poder mientras Israel liberaba a decenas de prisioneros palestinos en varios intercambios.
Pero acabada esta pausa, se retomaron las hostilidades aún con más fuerza, generalizándose de nuevo los bombardeos por toda la Franja. Tras un fin de semana de hostigamiento, un alto mando israelí afirmó que los objetivos de su país estarían casi cumplidos en la zona norte, por lo que las maniobras terrestres podrían extenderse a otras zonas de la Franja. En esos mismos momentos, los tanques israelíes ya habrían empezado sus incursiones en la zona sur de Gaza, llegando hasta las proximidades de Khan Yunis en una nueva fase de su ofensiva.
Hospitales, situación humanitaria y el paso de Rafah
A pesar de la semana de tregua que supuso un respiro para los gazatíes, la situación en la Franja sigue siendo absolutamente desesperada. Los bombardeos israelíes y la falta de suministros provoca la casi total inutilización de los hospitales de la Franja, especialmente en la mitad norte, mientras que los que continúan operativos en la zona sur se encuentran totalmente saturados con su capacidad ampliamente sobrepasada.
Durante esa tregua se permitió la entrada de ayuda humanitaria y combustible mediante el paso de Rafah, entrando varios camiones con alimentos y suministros, así como 130.000 litros de combustible y cuatro camiones de gas al día desde Egipto. Este material sirve para paliar temporalmente las carencias de la población civil, pero la reanudación de las hostilidades supuso el cierre de este corredor humanitario que permitía un mínimo abastecimiento de la población civil.
Por si la situación fuera ya poco desesperada, los nuevos avances militares de Israel hacia el sur han hecho que vuelvan a pedir la evacuación de la población de Gaza, en esta ocasión en los emplazamientos del sur de la Franja, lugar al que ya habían huido cientos de miles de personas tratando de escapar de los continuos bombardeos sufridos en la mitad norte y que, en buena parte, se encuentran hacinados en campamentos para refugiados o abandonados a su suerte.
La cuestión diplomática y los países del entorno
Las negociaciones y contactos internacionales para intentar mediar hasta alcanzar una tregua han supuesto un aumento de la actividad diplomática y política de los líderes internacionales. Entre ellos destacó la visita de Pedro Sánchez a Palestina, en la cual planteó la necesidad de una Conferencia Internacional para que se acabara el conflicto y la posible solución de dos estados independientes. Incluso dio un paso más allá, abriendo la puerta al posible reconocimiento unilateral de Palestina, aunque prefiriera hacerlo de una manera coordinada con otros socios europeos. Otras declaraciones del presidente criticando los ataques de Israel y mostrando sus dudas sobe el cumplimiento del derecho internacional desataron la indignación de Israel, que llamó a consultas a su embajadora tras dichas afirmaciones.
Más allá de esta actividad política internacional, en un plano más regional, la situación no ha cambiado, ya que Israel continúa con un intercambio casi diario de cohetes y bombardeos con Hezbolá en la frontera del Líbano, actividad que en algunas ocasiones llega a extenderse a territorio del sur de Siria.
Los hutíes de Yemen también están embarcados en su lucha contra Israel, intentando atacar buques de dicha nacionalidad cuando se aproximan al estrecho de entrada al Mar Rojo en el que se sitúa dicho país. Según fuentes del Departamento de Defensa de Estados Unidos, en las últimas horas el destructor estadounidense USS Carney y al menos un barco mercante de bandera británica han sido atacados con misiles y aviones no tripulados en la zona.
Pero quizá la situación más trágica del entorno se esté viviendo en Cisjordania, donde unas 250 personas han fallecido desde que comenzó el conflicto en Gaza, decenas de ellos menores. La mayoría murieron en enfrentamientos con las fuerzas del orden israelíes, pero algunos de ellos fallecieron en ataques de colonos. El aumento de la violencia y la frecuencia de estos enfrentamientos ha empezado a desembocar en la reanudación de los atentados, con un ataque armado palestino en una parada de autobús en Jerusalén donde murieron tres personas.
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