Más de 6,5 millones de personas han huido como refugiados del conflicto que ha arrasado Ucrania, con la gran mayoría de esta riada de refugiados situada en Europa.
Hay tres países que absorben prácticamente el 50% de este flujo de población: Rusia y Alemania por encima del millón de personas y Polonia al borde de esa cifra.
El destino de los refugiados ucranianos
A 12 de agosto hay 6.579.700 refugiados ucranianos que han tenido que huir de su país. La inmensa mayoría de los mismos se ha quedado en países europeos, por lo que 6.021.400 ucranianos han permanecido en el Viejo Continente. En cambio, 558.300 personas han debido marcharse fuera de Europa, la gran mayoría con destino a Canadá y Estados Unidos.
Rusia continúa como el país donde se han marchado más ucranianos, a pesar de la escasa información que brinda sobre sus fronteras. En concreto 1.227.555 ucranianos habrían marchado hacia el país ruso, destino seguido por Alemania, que se sitúa casi en las mismas cifras con 1.178.610 ucranianos. El tercer gran país de acogida de los refugiados ucranianos es Polonia, la principal vía de salida terrestre del país y que ya ha dado acogida a 957.505 personas.
A gran distancia de estos tres primeros países se sitúan otros lugares de destino, principalmente en Europa central y occidental. El principal acomodo del centro del continente es la República Checa, que continúa con su política de acogida y ya ha recogido a 353.510 refugiados ucranianos. Por encima de los 200.000 personas todavía hay dos países más, el Reino Unido con 244.560 personas y España, que supera esa barrera por poco (202.690 refugiados). Un escalón por debajo está Italia, que hasta el momento ha acogido a 170.925 personas y, por último, con cifras muy parecidas entre sí, cierran los diez países con más refugiados ucranianos Moldavia (123.295), que este mes vuelve a superar el dato de Eslovaquia (122.925), y Países Bajos (114.380).
Las peticiones de asilo
Bastante distintos son los números de las peticiones de asilo al compararse con las cifras efectivas de refugiados situados en cada país. En esta estadística el país más demandado es Polonia, que ha recibido 11.802.670 peticiones de asilo, seguido por Alemania, que ya supera 1,1 millones de peticiones (1.101.465). En tercer lugar se encuentra la República Checa con 615.235 solicitudes. Es curioso que entre los cinco países que más refugiados han acogido se encuentren los tres que reciben más peticiones de asilo y los otros dos tengan una diferencia tan abismal en las preferencias ucranianas. Rusia apenas ha recibido 14.970 solicitudes de asilo y el Reino Unido se mantiene en 1.260 solicitudes debido a la complejidad burocrática de la isla británica.
El cuarto país con mayor número de peticiones de asilo es España, que supera ligeramente la barrera de las 200.000 solicitudes (213.290), cifra a la que se aproxima Italia con 196.385 peticiones. Por encima de las 152.710 demandas de asilo de Países Bajos, siguiente país occidental en número de peticiones, se sitúan otros países del este de Europa con más solicitudes, a pesar de que no encontrarse entre los principales destinos de los refugiados. De hecho Bulgaria ya ha recibido 190.310 peticiones de asilo, a pesar de albergar sólo 62.700 ucranianos, y en números muy parecidos se mueve Rumanía, con 173.335 peticiones de asilo y 77.900 refugiados.
El flujo en las fronteras ucranianas
Las fronteras ucranianas muestran la complejidad de la situación desde que comenzó el conflicto. Desde el inicio de la guerra, las estadísticas recogen 38.167.425 movimientos de salida de Ucrania, mientras que en sentido contrario se han contabilizado 31.725.745 trayectos de vuelta al país. La estadística contabiliza todas las entradas o salidas que cualquier persona ha realizado a través de la frontera, por lo que se registran las múltiples entradas o salidas del país que pueda haber tenido cualquier persona a lo largo de estos más de dos años.
La principal vía de salida terrestre de Ucrania ha sido la frontera de Polonia, donde prosigue la mayor fluidez de movimientos. En la actualidad se han registrado más de 21,38 millones de movimientos de salida hacia territorio polaco frente a los 19,49 millones de retornos hacia el país ucraniano.
En cambio Hungría o Rumanía se mueven en números que apenas alcanzan una cuarta parte del flujo de la frontera polaca. La barrera magiar ha visto como salían por allí 5.288.490 personas frente a los 4.692.545 reingresos al país ucraniano. Los datos son bastante similares en Rumanía, donde ha habido 4,95 millones de salidas y 4,22 millones de retornos.
A una considerable distancia está la actividad de la frontera de Eslovaquia, donde han salido 2,51 millones de personas, y han retornado 2,41 millones de ucranianos. Por último Moldavia ha recibido 1,15 millones de entradas frente a los 0,88 millones de salidas.
Estos detallados datos son difícilmente trasladables a las fronteras de Rusia y Bielorrusia, donde sólo se han hecho públicos los números de los movimientos de salida de Ucrania y cuya actualización es bastante poco frecuente. Según la estadística ofrecida, Rusia habría recibido 2,85 millones de movimientos de entrada desde Ucrania y a Bielorrusia habrían entrado tan sólo 16.705 personas.