El pasado viernes miles personas protestaron en toda España con incomprensión e indignación ante la noticia de la puesta en libertad provisional bajo fianza de 6.000 euros para los cinco miembros de La Manada –condenados a nueve años de prisión por un delito de abuso sexual–.
Este lunes la secretaria de Estado de Igualdad, Soledad Murillo, ha defendido la necesidad de aplicar el Convenio de Estambul "en términos de tipificar la violación como se merece", al tiempo que ha criticado la decisión de la Audiencia de Navarra de dejar en libertad provisional bajo una fianza de 6.000 euros a los cinco miembros de La Manada que fueron condenados por un delito de abuso sexual y absueltos del de agresión.
En declaraciones a La Sexta, Murillo se ha referido así acerca de la revisión de la tipificación de los delitos sexuales. A su juicio, hay que cumplir el Convenio de Estambul y hay ciertos hechos que no se pueden interpretar en el Código Penal "como consentimiento": "Es muy grave que tengamos el abuso sexual y no la violación y es muy grave la desprotección que sentimos las mujeres", ha sentenciado.
Tras este auto, las mujeres se sienten "absolutamente desprotegidas"
La secretaria de Estado de Igualdad ha explicado que los delitos contra la libertad de las mujeres "han cambiado con el tiempo". "En el año 1995 lo que se suponía libertad sexual no es lo mismo que lo que se plantea ahora en 2018, es mucho más exigente".
"No hay que hablar de resistencia de si está técnicamente o no la sentencia argumentada. Tenemos que hablar de que directamente se apoyan unos hechos que tipifican como violación el resultado de las consecuencias de los mismos", ha agregado.
Además, ha rechazado las actuaciones y fianzas relativas a la libertad provisional porque "son prácticamente simbólicas". De hecho, en el caso de la libertad condicional bajo fianza concedida a los miembros de La Manada ha recalcado que el Estado tiene la "obligación" de proteger a los ciudadanos y, tras este auto, las mujeres se sienten "absolutamente desprotegidas". "No me corresponde a mi como mujer proteger mi integridad y mi dignidad, sino que debo estar tutelada por el Estado", ha apuntado.