Un tsunami provocado por la erupción submarina del volcán Hunga-Tonga-Hunga-Ha'apai ha causado graves daños materiales en las poblaciones la línea de playa del reino de Tonga, así como la declaración de alertas de tsunamis y fuertes oleajes por toda la región del Pacífico, sin que de momento se tenga constancia de víctimas.
La costa norte de Chile ha sido azotada este sábado por la tarde por un tsunami con olas de casi dos metros en la zona norte, tras la erupción submarina del volcán Hunga-Tonga-Hunga-Ha'apai. Las olas más grandes han llegado a algunas áreas del norte del país como Iquique y Atacama, donde se produjeron inundaciones leves, según ha confirmado el Servicio Hidrográfico y Oceanográfico de la Armada de Chile (SHOA).
Las autoridades chilenas han ordenado la evacuación de las costas en 14 de las 16 regiones de Chile, y han decretado "alerta roja" en seis zonas del litoral.
"Todas aquellas regiones que están en Estado de Precaución tienen que mantenerse alejada de las orillas (...) obviamente el peligro y el riesgo es mayor y requiere medidas especiales que en este caso es abandonar no solamente la zona de playa, sino dirigirse a la cota 30", ha alertado Claudio Aldea, subdirector de operaciones de la Oficina Nacional de Emergencias del Ministerio del Interior (ONEMI), según recoge el diario local La Tercera.
#ÚltimaHora: Población de El Chaco, en #Perú quedó bajo las aguas debido al #Tsunami de Tonga,
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Ocho minutos de erupción
Han sido apenas ocho minutos de erupción, pero Vanuatu, Fiyi, Australia y los estados norteamericanos de Samoa Occidental y Hawái han emitido alertas por fuerte oleaje. En este último caso, el Centro de Advertencia para Tsunamis del Pacífico ha constatado "pequeñas inundaciones" antes de añadir nuevas alertas para la costa oeste de EEUU e incluso Alaska y el oeste de Canadá.
#Tonga Muestra de video de la erupción del volcán marino. #tsunami pic.twitter.com/fx28Hg7YHf
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También en las últimas horas la Agencia Meteorológica de Japón ha emitido una alerta por tsunami para las islas de Amami y Tokara, así como en la prefectura de Iwate, en el sur del país. organismo nipón prevé olas de hasta 3 metros de altura en estas islas, donde ya se ha observado la llegada de la primera ola, de 1,2 metros de altura.
El resto de la costa japonesa se encuentra bajo una alerta por fuerte oleaje, de acuerdo con el comunicado recogido en la web de la agencia. "Las personas en áreas costeras bajo avisos de tsunami deben mantenerse alejadas de las playas y las desembocaduras de los ríos", alerta el comunicado, recogido por NHK.
El Servicio Meteorológico de Tonga emitió una advertencia para todo Tonga alrededor de las 15.30 (hora local) tras confirmar la aparición de un tsunami de 1,2 metros que se aproximaba a la capital, Nuku'alofa.
Las ceniza alcanzan los 20 kilómetros de altura
La ceniza expulsada por el volcán, situado a unos 30 kilómetros al sureste de la isla de Fonuafo'ou, ha alcanzado los 20 kilómetros de altura y la explosión, claramente visible desde el espacio, fue acompañada de un seísmo de magnitud preliminar 4,0, según los datos del Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS).
Las autoridades dieron orden de evacuación inmediata a las poblaciones de las zonas costeras antes de que la primera crecida comenzara a inundar las residencias más próximas al agua, según informa el New Zealand Times, pero la situación sobre el terreno sigue siendo incierta, porque las comunicaciones están ahora mismo cortadas.
Por su parte, el portal Island Business ha informado que el rey Tupou VI ha sido evacuado del Palacio Real antes de que la crecida llegara a la capital. El monarca ha sido trasladado a una villa en Mata Ki Eua mientras los residentes se dirigían a un terreno más alto.
La erupción del volcán es la segunda en las últimas horas, según ha informado el experto en tsunamis Andrew Gissing, responsable de Risk Frontiers, al New Zealand Herald, tras la ocurrida el viernes. Sin embargo, "ésta parece ser mucho más grande" y un nuevo despertar tras cierta actividad registrada durante los últimos días de diciembre y la primera semana de enero.
Los países de la región también están bajo estado de alarma después de que otro fuerte oleaje ha impactado en las playas de Vanualevu, en Fiyi, donde fue emitida una alerta temporal por tsunami, como también ha ocurrido en Vanuatu. El estado de Samoa Americana también emitió una alerta por oleaje, finalmente cancelada.
En Fiyi, su fiscal general, Aiyaz Sayed-Khaiyum, ha informado de que las autoridades están supervisando la calidad del aire y ordenado la apertura de centros de evacuación. Las personas deben trasladarse a un terreno más alto si es necesario y evitar la línea de costa. Se sabe que al menos un centenar de familias consiguieron escapar de aldeas de Palauli y Satupaitea antes del el impacto de una gran ola contra la línea de playa.
"Como medida de precaución, se recomienda a la población que cubra todos los tanques de agua que pueda tener en sus casas y se queden dentro de sus domicilios en el caso de la llegada de lluvia ácida", ha explicado.
Tsunami y ciclón combinados en Nueva Zelanda
Asimismo, Defensa Civil de Nueva Zelanda anticipa que "las áreas de la costa norte y este de la Isla Norte y las Islas Chatham experimenten corrientes fuertes e inusuales y oleadas impredecibles". Ya en la mañana del domingo, Defensa Civil ha advertido de que la alerta sigue vigente para estas regiones y se extiende a la costa occidental de la Isla Sur.
A todo ello se suma los fuertes vientos provocados por el ciclón Cody que afecta a la región de Aotearoa, en la Isla Norte. Medios neozelandeses han informado ya de daños en embarcaciones amarradas en Tutukaka y un camping evacuado en Mahinepua.
Muchas embarcaciones han quedado "completamente destrozadas" por una ola unos dos metros mayor que la línea de marea alta que habría sido resultado de la combinación del ciclón y el tsunami.
Mientras tanto, el Gobierno federal australiano ha comunicado un aviso parcial de tsunami para las costas de Nueva Gales del Sur y Queensland, así como para partes de Victoria, Tasmania y la isla de Norfolk, y está "supervisando la situación y "listo para brindar apoyo a Tonga si así lo solicita", de acuerdo con un comunicado.
"Tonga es parte de nuestra familia del Pacífico y nuestros pensamientos están con toda la comunidad que se enfrenta al impacto de la erupción volcánica y el tsunami", según portavoz del Departamento de Relaciones Exteriores y Comercio de Australia.
"Las evaluaciones iniciales todavía están en marcha y estamos trabajando para garantizar que los australianos en Tonga estén seguros y contabilizados", añade la nota, recogida por la cadena australiana ABC.
En Estados Unidos se ha informado de las primeras olas en la costa del Pacífico de una altura de 1,2 pies (unos 36,5 centímetros), según ha informado un portavoz del Centro Nacional de Alertas de Tsunami de Estados Unidos, Dave Snider, en declaraciones a la CNN. La ola ha sido registrada en Nikolski, Alaska.
También se han registrado olas de 1 pie (30 centímetros) en Atka, Adak y King Cove, también en Alaska. "Puede que no sea la ola más alta que venga", ha afirmado Snider, que ha subrayado que el evento no ha terminado. La alerta sigue en vigor para la costa oeste en estados como California, Oregón, Washington y Alaska, aunque por el momento no hay constancia de daños.
Cae la noche en Tonga
El líder de la comunidad tongana en la ciudad neozelandesa de Auckland, Melino Maka, lleva horas intentando comunicarse con la isla, sin suerte. "Es un momento bastante ansioso para nosotros. Me quedaré despierto y seguiré intentándolo. Todas las redes están caídas", ha explicado al Herald sobre la situación actual en la isla, ahora mismo de madrugada.
Maka ha avisado que "esta noche sería una noche difícil para los que están en el terreno, así como para las familias en Nueva Zelanda y en todo el mundo que esperan la luz del día para ver cuál es el daño". "Las familias están esperando a ver qué sucederá. Eso es lo más desesperado: no saber", ha añadido.
"Después de ver los videos en línea y en la televisión, sabemos que habrá daños", ha indicado.
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