Investigadores del Centro de Física de la Materia Condensada (IFIMAC) de la Universidad Autónoma de Madrid (UAM) trabajan en el desarrollo de nuevas tecnologías para fabricar máscaras de protección y, en general, tejidos más seguros para evitar el contagio por patógenos infecciosos y más concretamente por partículas víricas.
El equipo se propone desarrollar una nueva tecnología para la fabricación de tejidos basada en modificar textiles ‘no-tejidos’ (no woven, en inglés), es decir, formados a partir de fibras unidas por procedimientos mecánicos, térmicos o químicos, pero no hiladas, como las gamuzas, por ejemplo. El caso paradigmático aquí sería el polipropileno no tejido, que es el material utilizado en la mayoría de los filtros de mascarillas actuales.
“Pretendemos incorporar materiales bidimensionales como grafeno y/o derivados de este, por ejemplo óxido de grafeno, y generar así una barrera antiviral especializada en SARS-CoV-2”, explican los autores del proyecto, “y para ello utilizaremos un proceso sencillo y escalable, basado en una patente desarrollada en nuestro grupo de investigación, que permite generar ‘tintas’ de grafeno”.
“Nuestro objetivo es desarrollar una tecnología que ayude a mejorar la efectividad y comodidad de las máscaras y, en general, de textiles profilácticos diseñados contra el virus SARS-CoV-2, pero adaptable a otros virus”, destacan los investigadores.
Centros de investigación y empresas
El proyecto está liderado por Félix Zamora, Pedro J. de Pablo y Julio Gómez dentro de un consorcio en el que, además de los grupos del IFIMAC-UAM, también participa el Centro Nacional de Biotecnología (CNB-CSIC) y el Grupo de Física de la Atmósfera de la Universidad de Granada.
En esta iniciativa intervienen tres empresas españolas: Nanoinnova Technologies, que suministra grafeno y derivados; Non-woven Ibérica, que produce materiales tejidos no-tejidos, y Textil Elástico, dedicada a la fabricación de productos elásticos ortopédicos, que es quien producirá las mascarillas.