El 43 %  de españoles y españolas asegura que la compra de segunda mano se encuentra entre sus primeras opciones a la hora de adquirir cualquier producto y el 55 %  de los consumidores señala a las plataformas online de segunda mano como las que más están trabajando en promover la economía circular.

 

'La Red del Cambio'

 

Así lo pone de manifiesto la tercera edición del estudio 'La Red del Cambio' sobre sostenibilidad y hábitos de consumo entre las y los ciudadanos presentado este jueves por Wallapop y realizado de la mano de Kantar, que refleja que el 96 %  de españoles y españolas aseguran que consumirían productos sostenibles si su precio fuera más asequible.

El estudio, con una muestra de la población de 1.000 individuos (hombres y mujeres) entre 16 y 60 años, revela que, en el contexto postpandémico, la preocupación por el medio ambiente de españoles y españolas ha abandonado los primeros puestos, lo que no quiere decir que la ciudadanía no se guíe por patrones de consumo sostenibles.

Concretamente, la investigación resalta que el 90 %  de españoles y españolas realiza un consumo consciente y uno de los criterios más relevantes para ese consumo consciente es la sostenibilidad.

Además, el 62 %  de las y los encuestados tiene en cuenta el impacto en el medio ambiente a la hora de la compra y hasta el 96 %  asegura que consumiría productos sostenibles si su precio fuera más asequible.

 

Segunda mano

 

Los productos de segunda mano, según refleja el estudio, son una opción de compra para casi la mitad de los españoles y españolas. En este sentido, el 83 %  indica haber comprado o vendido productos en los últimos tres años.

Por grupos de edad, la encuesta revela que un 70 %  de las y los 'millenials' encuestados asegura haber comprado o vendido productos de segunda mano en los últimos tres año, mientras que la Generación Z se muestra como la más comprometida con el futuro de estas plataformas, ya que hasta un 64 %  de las y los encuestados ya adquiere o vende artículos ya producidos y un 71 %  espera comprar más productos reutilizados que nuevos en los próximos tres años.

 

Primero le pide cuentas a las administraciones

 

La investigación muestra la diferencia respecto a la época prepandémica, ya que actualmente el consumidor "no se autoinculpa tanto" por ser el primero en hacer el patrón de consumo sostenible con el medio ambiente, sino que "primero le pide cuentas a las administraciones".

Asimismo, la encuesta subraya que más de la mitad de los consumidores y consumidoras se sienten bien consigo mismas cuando compran o venden, sobre todo por su contribución al planeta.

El acto de presentación del estudio ha sido inaugurado por el CEO de Wallapoo, Rob Cassedy, quien, a través de un vídeo, ha valorado que el informe "confirma que españoles y españolas siguen comprometidas con el medio ambiente". "Compañías e instituciones deben hacer de la sostenibilidad una prioridad", ha reclamado.

Posteriormente ha intervenido la directora General de Economía Circular de la Comunidad de Madrid, Cristina Aparicio, que ha hecho autocrítica: "Muchas veces empresas y administraciones miramos únicamente lo que hacemos pero no miramos lo que hay fuera, qué hacen las y los consumidores, la cadena de valor, qué piensan y qué les importa".

Así, ha destacado que el fin último de este estudio "es muy importante" porque cuando se habla de economía circular casi todos piensas en reciclar, "que es muy importante, pero no es la única palanca". "Es muy importante dar un segundo uso y alargar la vida de los productos que únicamente ir a reciclar", ha concretado.

 

Responsabilidad de la moda en la "necesidad de consumir"

 

Posteriormente, durante un panel de debate para profundizar en los datos del estudio, la presentadora y divulgadora sobre sostenibilidad, Martina Klein, ha hecho también referencia a su trabajo como modelo durante 30 años y al consumismo que hay en el sector. "De alguna forma tengo que entonar una especie de 'mea culpa' de ver hacia dónde se ha ido la moda y cuánto tiene que ver en el exceso de producción", ha reconocido.

 

El "tan barato"  significa que, como consumidores, estamos abusando de gente

 

En este sentido, ha advertido de que el sector ha creado "una necesidad de consumir" en la gente y en el "tan barato". "Al verlo tan barato nos vemos más tentados a comprar. Cuando algo es tan barato significa que, como consumidores, estamos abusando de gente que está en situación de inferioridad. La moda tiene muchos deberes, tiene muchas cosas que cambiar", ha asegurado.

En la misma línea, el influencer y divulgador de sostenibilidad, Jon Kareaga, ha defendido que hay que comprar solo cosas que se necesiten. "Compro cosas porque sé que luego las voy a vender y así también entramos en un círculo de consumismo. Veo un peligro en hasta qué punto compramos cosas que no necesitamos", ha lamentado.

Con el objetivo de animar a la gente a comprar productos de segunda mano, Kareaga ha puesto en valor la historia que han tenido los productos: "Está bien que los objetos tengan una vida detrás".

 

"Lo más barato es no comprar, lo más sostenible es lo que ya tienes”

 

El influencer ha hecho referencia a que, según el estudio, al 62 %  de la población le influye el medio ambiente a la hora de comprar y solo el 27 %  deja de comprar algo por su alto impacto en el medio ambiente. "Estamos en el camino pero todavía nos falta una maratón. Lo más barato es no comprar, lo más sostenible es lo que ya tienes", ha reivindicado.

Para la presidenta de Talento para el Futuro, Elsa Arnaiz, la ciudadanía tiene que ver la transición ecológica "como una oportunidad para todos y no como un impedimento".

Por último, la chief Marketing Officer de Wallapop, Olivia Calafat, ha animado a todas y todos, a celebrar si se compran una bicicleta de segunda mano, "porque el planeta está en un mejor sitio".

 

Fomentar la compra-venta de segunda mano

 

"Cuando vas a Inglaterra o Estados Unidos todo el mundo compra en segunda mano. Vemos la segunda mano como una solución a los que quieren ser sostenibles pero con un precio asequible", ha concluido Calafat. Finalmente, todos ellos han coincidido en la importancia de fomentar la compra-venta de segunda mano como algo "sexy".