WWF España ha alertado a los principales supermercados europeos y ha remitido documentación para que analicen si sus proveedores de verduras y frutas cuentan con la legalidad de agua y suelo, para que solo adquieran productos que provengan de fincas con garantías de legalidad certificada.
Como señala la ONG, las inmediaciones del Mar Menor y Campo de Cartagena son uno de los principales huertos de Europa y abastecen al mercado europeo de brócolis, lechugas y cítricos. Sin embargo, al menos, 8.500 hectáreas de estos cultivos son ilegales, según estimaciones de WWF y ANSE, generando una competencia desleal a los agricultores legales, "un daño irreparable al medio ambiente y a la imagen del sector agrícola".
Por esta razón, WWF España ha enviado a los principales supermercados europeos con quienes trabaja ya en otras zonas como Doñana, información sobre la situación que atraviesa el Mar Menor y una guía para garantizar que sus importaciones provengan de productores y fincas con garantías legales.
Vertido diario de más de 5.000 kilos de nitratos y fosfatos
"La sensibilidad de los consumidores europeos es cada vez mayor y exigen garantía de que los productos que compran se han obtenido de forma legal, justa y sin dañar a la naturaleza, por lo que esperamos que, a partir de ahora, los supermercados también reclamen estas garantías en el caso de la agricultura que afecta al Mar Menor", ha afirmado el secretario general de WWF España, Juan Carlos del Olmo.
El crecimiento descontrolado, en muchos casos ilegal, de la agricultura intensiva de frutas y verduras se disparó en los años setenta tras la llegada del trasvase Tajo-Segura, ante la inacción de las administraciones, como denunció WWF y ANSE en el informe La burbuja del regadío: el caso del Mar Menor. Ambas organizaciones denuncian de que este boom de la agricultura intensiva e ilegal ha contaminado el acuífero y la laguna por el vertido diario de más de 5.000 kilos de nitratos y fosfatos.
Ante esta situación, WWF ha lanzado la campaña No más veneno al Mar Menor para pedir a las autoridades que salven y devuelvan la vida a la mayor laguna salada litoral de Europa. Además, la ONG ha comunicado que organizará jornadas de formación con los representantes de los supermercados europeos y de las administraciones.