La Comisión Europea ha abierto este martes una consulta pública para abordar las medidas regulatorias y el etiquetado de productos que generan microplásticos para reducir la cantidad de partículas liberadas involuntariamente al medio ambiente y mitigar, así, su impacto sobre la salud humana y los ecosistemas.

 

Consulta abierta hasta el 17 de mayo

 

La consulta abierta hasta el 17 de mayo se centrará en analizar las principales fuentes que contribuyen al microplástico como los propios plásticos, los textiles sintéticos o los neumáticos, pero también se evaluarán otros orígenes como las pinturas, los geotextiles o las cápsulas de detergente para la ropa y lavavajillas.

Esta nueva iniciativa se centrará en el etiquetado, la estandarización, la certificación y las medidas regulatorias para las principales fuentes de generación de microplásticos y se enmarca en el Plan de Acción de Economía Circular y en el Plan de Acción de Contaminación Cero.

 

Efectos adversos para la salud humana, los ecosistemas y la biodiversidad

 

Los microplásticos son partículas de este material que tienen un tamaño inferior a los 5 milímetros y su acumulación genera problemas en la cadena alimentaria, en el agua o en los organismos vivos.

La contaminación por microplásticos tiene efectos adversos para la salud humana, la biodiversidad y otros ecosistemas vulnerables y también afectan a la calidad de las aguas costeras o la acuicultura