Los microplásticos pueden reducir la capacidad del océano para ayudar a compensar la crisis climática al disminuir la velocidad a la que se extrae carbono de la superficie del mar a las profundidades.
Fitoplancton muerto
Es la conclusión de un nuevo estudio publicado en la revista Marien Chemistry (1), del que es autor el investigador Aron Stubbins de la Universidad de Northeastern.
Durante milenios, el océano ha sido parte de un proceso de sumidero de carbono en el que el fitoplancton muerto se agrupa y cae a las profundidades del océano en lluvias de lo que parece "nieve marina", dice Stubbins, profesor de ciencias marinas y ambientales.
Los océanos, principales sumideros de carbono
Los océanos son considerados los principales sumideros de carbono naturales, ya que son capaces de absorber alrededor del 50% del carbono emitido a la atmósfera. En concreto, el plancton, los corales, los peces, las algas y otras bacterias fotosintéticas son los organismos encargados de esta captura.
El plancton, los corales, los peces, las algas y otras bacterias fotosintéticas son los organismos encargados de esta captura
En el caso de los bosques y otras áreas forestales, el secuestro de carbono se realiza mediante la fotosíntesis. Las especies vegetales absorben CO2 de la atmósfera, almacenan una parte del carbono y devuelven oxígeno a la atmósfera.
El problema de los sumideros de carbono naturales es que tienen un límite, provocando la acidificación de los océanos cuando se sobrepasa. Esta acidificación consiste en un descenso del pH provocado por la absorción de dióxido de carbono.
La acidificación de los océanos impacta negativamente en especies como corales, algas, mariscos y moluscos, que se ven debilitados y en muchos casos enferman y mueren.
La investigación muestra que los microplásticos en el océano están ralentizando el proceso al hacer que la "nieve marina" sea más flotante, dice Stubbins.
Secuestro de carbono
"Los plásticos quieren flotar. Si el fitoplancton crece sobre microplásticos en biopelículas, ello cambia la flotabilidad del fitoplancton cuando muere", dice Stubbins.
"Básicamente, los plásticos están ralentizando el ritmo de hundimiento de la nieve marina, lo que potencialmente reduce la eficiencia con la que el océano puede eliminar el dióxido de carbono de la atmósfera", afirma.
Para el estudio, investigadores e investigadoras cultivaron el diminuto plancton unicelular en tanques con y sin exposición a microplásticos.
Luego llevaron a cabo su propia versión de una carrera hacia el fondo. Colocaron grupos regulares de fitoplancton en un cilindro medidor lleno de agua de mar y colocaron el fitoplancton entrelazado con microplásticos en otro cilindro.
"Se cronometró la rapidez con la que se hundieron", dice Stubbins. "Los de plástico fueron más lentos, alrededor de un 20%".
Dice que el estudio, realizado en colaboración con la Universidad de New Hampshire, muestra que la desaceleración del ritmo de descenso de la nieve marina mezclada con microplásticos llega en un momento en que el secuestro de carbono es más importante que nunca.
"A medida que ese carbono se hunde, es transportado a zonas más profundas del océano", dice Stubbins. "Es muy importante saber en qué medida el océano compensa el calentamiento debido a las emisiones humanas de dióxido de carbono".