Más de la mitad de la deforestación tropical en todo el mundo está vinculada a la exportación de productos básicos y ocurre en menos del 5% de estas regiones productoras y, a su vez, esta producción está en manos de "un puñado" de empresas multinacionales, según una investigación que publica este jueves TRASE, una iniciativa científica de dos entidades, de Suecia y Reino Unido, que analiza la cadena de suministro.
El Anuario Trase 2020 ha identificado un grupo de puntos críticos, de productos básicos y de empresas que están "detrás de la mayoría de la deforestación tropical vinculada a este comercio".
Así, analiza los productos básicos, las regiones y las cadenas de suministro con los mayores impactos por la deforestación, incluidos la Amazonia, el Cerrado y el Gran Chaco.
Además, el estudio muestra dónde deben enfocarse los esfuerzos para reducir la deforestación vinculada a la producción de productos básicos como carne de res, soya y aceite de palma.
El director de Trase, la iniciativa conjunta del Instituto de Medioambiente de Estocolmo y de Global Canopy, Toby Gardner, ha explicado que los datos señalan puntos críticos de deforestación vinculados a las principales exportaciones y mercados, y muestran "una y otra vez" que la mayor parte del problema se concentra en "un puñado de proveedores" y en "un puñado de lugares".
Un puñado de empresas increíblemente poderosas
Sin embargo, afirma que este "puñado de empresas" son "increíblemente poderosas" ya que proporcionan puntos de entrada para la acción de las empresas, gobiernos e inversores que pueden catalizar y dirigir la aplicación, inversión y la participación "donde más se necesita".
El anuario utiliza solo datos procedentes de la propia cadena de suministro y que vinculan la producción de productos básicos, empresas comerciales específicas y mercados de consumo.
De acuerdo con estos datos, Trase denuncia que entre el 50 y el 70% de todas las exportaciones de soya, carne de res y aceite de palma producidas en Brasil, Paraguay, Argentina e Indonesia, por los 5 principales exportadores para cada producto.
Asimismo, por primera vez los datos revelan que más de la mitad de la deforestación vinculada a estos tres productos agrícolas comerciales se produce en el 5% o menos del área total donde se producen los productos.
Precisamente, el informe destaca asimismo que las exportaciones de esos productos se destinan a mercados específicos de Europa, aunque cada vez más se dirigen a China y otras economías emergentes.
Trase ha identificado los "puntos críticos" que se encuentran en emplazamientos que atraen poco interés internacional, como el Cerrado brasileño o los bosques secos del Gran Chaco de América Latina.
No obstante, los principales compradores y mercados de productos básicos como la soja y la carne de vacuno suelen estar vinculados a los mayores impactos ya que los compradores, según el informe, que se abastecen "desproporcionadamente de estos puntos críticos tienen una huella de carbono hasta diez veces mayor que la del comprador promedio.
Por mercados, la UE importa menos soja que China y tiene algunos compromisos contra la deforestación más fuertes, aunque en la última década sus importaciones están vinculadas a más deforestación por tonelada.
España, el mayor consumidor europeo de soja
Según el estudio, se debe a que genera mayores volúmenes de puntos críticos de deforestación. Por ejemplo, la huella de carbono de las importaciones de soja a España, el mayor consumidor europeo de productos básicos, es, por tonelada, seis veces mayor que la de China, que es el mayor comprador de soja, carne de vacuno y aceite de palma producido en los trópicos.
El informe también se expone la preocupación sobre la sostenibilidad relacionadas con la producción y el comercio de carne de vacuno ante el aumento de la demanda mundial.
De hecho, el anuario estima que en 2018 la expansión de los pastos para la producción de carne fue responsable del 81% de la deforestación en la Amazonía brasileña, el 95% de la deforestación en el Chaco paraguayo y más del 54% en el Cerrado.
Al mismo tiempo, revela que el 3% de los 2.803 municipios productores de carne de res en Brasil están asociados con más de la mitad de la deforestación relacionada con las exportaciones de carne de vacuno.
En ese sentido, señala que las exportaciones de carne de res de Paraguay están vinculadas a más de nueve veces la deforestación que las exportaciones de la Amazonía brasileña.
En cuanto a las exportaciones de ganado vivo, principalmente para los mercados halal de Oriente Medio, el anuario de Trase afirma que están asociadas con "casi cinco veces" la deforestación vinculada a las exportaciones de carne fresca.
En concreto, sobre las exportaciones de vacuno añade que están vinculadas a una deforestación que es 1.000 veces mayor que las exportaciones brasileñas de pollo, aunque las exportaciones de soja para alimentación de animales en otros lugares siguen vinculadas a los altos niveles de deforestación en Brasil.
Compromisos de deforestación cero
El Anuario concluye que, en promedio, las diferentes empresas con compromisos voluntarios de deforestación cero todavía no se desempeñan mejor que las que no lo tienen, mientras que la mayoría de las exportaciones de productos clave como la carne de res todavía no están cubiertas por un compromiso.
La editora principal del anuario y líder de Trase en Global Canopy, Helen Bellfield, ha manifestado que en muchos países la tasa de deforestación agrícola ha descendido de los años pico de hace una década. "Sin embargo alerta de que la falta de progreso en la implantación de los compromisos de cero deforestación y los recientes aumentos en la deforestación en algunas áreas, incluida la Amazonía brasileña, subraya cuán frágiles son estos logros", ha lamentado.
Por ello reclama a empresas y gobiernos que apunten a la implantación de estas políticas, ya que estos datos de rastreo brindan "un gran paso adelante" en la capacidad para evaluar la efectividad de los esfuerzos de implantación.