El fuego ha arrasado un total de 59.568,76 hectáreas de superficie en lo que va de 2023 hasta el 9 de julio, lo que representa un 70 por ciento más que la media del decenio (35.040 hectáreas) y un 18,7 por ciento menos que en el mismo periodo de hace un año, según datos del Ministerio para la Transición Ecológica y Reto Demográfico (MITECO).
En los primeros cuatro meses del año el fuego se cobró 39.381,42 hectáreas; y un mes más tarde, las hectáreas quemadas alcanzaban 47.784,98 de enero a mayo, casi el triple que en el mismo periodo de 2022. No obstante, las abundantes lluvias de junio podrían haber contribuido a retener los incendios.
Lo transcurrido de 2023 destaca por el alto número de grandes incendios forestales (GIF), ya que se han registrado 15 fuegos de más de 500 hectáreas, la mayor cifra hasta el 9 de julio de los últimos diez años, y que incluso supera a los 12 GIF del año pasado.
En concreto, en este año se han contabilizado 5.007 siniestros, una cifra menor a la media del decenio, de 5.044 fuegos, e incluso inferior a la de 2022, cuando se registraron 5.561 siniestros. De estos, 3.241 fueron conatos, es decir que se extinguieron antes de que se quemara una hectárea de superficie y otros 1.766 fueron incendios de más de 1 hectárea y de ellos, 15 pasaron a la categoría de gran incendio forestal.
La más perjudicada es la región noroeste
Cabe destacar que las cifras del Ministerio consultadas por Europa Press, por tipo de vegetación ardieron 38.320,86 hectáreas de superficie matorral y monte abierto; 16.701,77 hectáreas de superficie arbolado y las 4.546,13 hectáreas restantes, de pastos y dehesas.
Por zonas, la más perjudicada es la región noroeste, que acumula el 46,74 por ciento de los siniestros acaecidos. Además, en esa región se registraron 66,77 por ciento del total de la superficie forestal quemada y el 34,36 por ciento de la superficie arbolada.
Por su parte, las Comunidades interiores acogieron el 30,63 por ciento de los incendios. En esas regiones se han quemado el 47,11 por ciento de la superficie arbolada y el 24,63 por ciento de la superficie forestal.
Mientras, en el Mediterráneo han acaecido el 22,15 por ciento de los incendios y allí se quemó el 18,52 por ciento de la superficie arbolada y el 8,58 por ciento de la superficie forestal. Finalmente, Canarias acumula apenas el 0,4 por ciento de los siniestros, con el 0,01 por ciento del total de la superficie arbolada quemada y el 0,02 por ciento de toda la superficie forestal.