El final de las persistentes lluvias que barrieron la Península en la primera quincena de septiembre y las altas temperaturas del veranillo de San Miguel, anormalmente elevadas por encima de los 30 grados, han generado una reaparición de los focos de incendios forestales. En la actualidad, la zona más afectada es el cuadrante occidental de la Península y la isla de Mallorca, con varios siniestros en cada zona.
Mapa de los incendios forestales activos
A 2 de octubre, la isla de Mallorca se encuentra afectada por hasta tres pequeños focos. La otra zona principalmente afectada es la mitad occidental de la Península. En su región norte hay dos focos localizados en las montañas asturianas y en el interior de Cantabria. Mientras, en la zona sur también hay hasta cuatro focos, dos en la provincia de Badajoz, uno más en el norte cordobés y un último en la costa malagueña. También hay otro siniestro aislado cerca de la costa murciana.
Hectáreas quemadas por incendios forestales
El tranquilo mes de septiembre en cuanto a incendios forestales se traslada a las estadísticas. Así, en los datos hasta el 24 de septiembre, este año han ardido 80.775,32 hectáreas, apenas 2.250 de ellas en el último mes, y cifra que resulta unas 3.500 hectáreas inferior a la media del decenio. La cifra adquiere mayor relevancia cuando se compara con las 260.000 hectáreas que habían ardido a estas alturas del catastrófico 2022.
El número de siniestros también ha sido moderado en el último mes, unos 480, que dejan el acumulado anual en 6.918. Esta cifra es 1.700 siniestros inferior a la media del decenio (8.603) y 2.300 menos que los números del año pasado (9.236).
La reducida superficie siniestrada en las últimas semanas hace que la superficie arrasada por zonas no sufra grandes cambios. La zona más afectada sigue siendo las regiones del Noroeste, con un 50,84%, experimentando una caída algo superior a un punto. Por el contrario, crecen ligeramente el resto de zonas, con las Comunidades interiores con un 21,20% de la superficie arrasada, Canarias con un 19,37% y el Mediterráneo con un 8,59% del total siniestrado en 2023.
En cuanto al tipo de vegetación incendiada, matorral y monte abierto sigue siendo la más afectada, con unas 1.300 hectáreas siniestradas en el último mes hasta un total de 42.259,30 en lo que va de año. A continuación, la superficie arbolada ha visto calcinadas este mes unas 500 hectáreas hasta un total anual de 34.346,68 hectáreas y, por último, unas 400 hectáreas de pastos y dehesas ardieron en septiembre para un total de 4.169,34 en el año 2023.