Tras un total de 19 semanas consecutivas de pérdidas, los embalses españoles suman dos semanas seguidas de recuperación para situarse en el 50,0% de sus reservas. Después de largos meses de caídas ininterrumpidas en el nivel de los embalses, las precipitaciones generalizadas acontecidas en este mes de octubre dan inicio a la habitual recuperación de estas fechas, que podría continuar durante el resto del mes y del próximo otoño.

 

Mapa de la evolución del agua en los embalses españoles

 

Mapa de la situación de los embalses en España por cuencas hasta el 22 de octubre de 2024 / Imagen: EA Mapa de la situación de los embalses en España por cuencas hasta el 22 de octubre de 2024 / Imagen: EA

Más en concreto, en los últimos siete días ha habido un crecimiento de 863 hectómetros cúbicos para situarse exactamente en la mitad de su capacidad máxima, con un total de 28.040 hectómetros embalsados. En la comparación con el año pasado, la recuperación del nivel del agua embalsada de 2023 también comenzó por estas fechas, con un aumento similar para situarse en un 35,6%, cifra más de 14 puntos inferior a la albergada en la actualidad.

 

La situación por cuencas hidrográficas

 

Situación de los embalses y evolución del agua embalsada en datos a 22 de octubre de 2024 / Infografía: EA Situación de los embalses y evolución del agua embalsada en datos a 22 de octubre de 2024 / Infografía: EA

La ganancia de las reservas ha sido generalizada en todas las cuencas de la Península, con algunos aumentos espectaculares como los 4,4 puntos que ha crecido el Ebro en los últimos siete días. En líneas generales, las cuencas del norte continúan con los mejores porcentajes de agua embalsada, con el País Vasco y el Cantábrico Oriental por encima del 90%, en una situación de llenado técnico. Por el contrario, a pesar de las precipitaciones, la situación no tiene visos de mejorar a corto plazo en cuencas cercanas al límite del 20%, como la cuenca Mediterránea Andaluza o el Guadalete-Barbate, y ya con una situación dramática en el Segura, donde apenas hay embalsado un 14,6% de su capacidad.

Entre las altas cifras de las cuencas de la cornisa norte ha habido comportamientos divergentes, con alternancia de subidas y bajadas. El mayor crecimiento lo ha protagonizado Galicia Costa, que subió 2,2 puntos hasta el 73,7% del total. También incrementó sus reservas 1,4 puntos el Cantábrico Oriental para alcanzar el 90,4%. Mientras el País Vasco continúa inalterable en el 90,5%, el Cantábrico Oriental y el Miño-Sil experimentaron ligeros descensos de un punto y seis décimas, respectivamente, aunque aún permanezcan en el 75,9% y el 67,4%.

La Meseta asiste a un proceso de recuperación de sus dos grandes cuencas. El Duero ha ganado dos puntos en los últimos siete días y se queda con un 65,3% de su capacidad, mientras que el Tajo también gana 1,1 puntos y llega al 56,0%.

En la mitad sur atlántica también se han dado crecimientos generalizados que, en algunos casos, ayudan a mejorar cifras que comenzaban a ser preocupantes. Los mejores números llegan una semana más del Tinto, Odiel y Piedras que gana nueve décimas hasta el 71,2%. El mismo crecimiento ha experimentado el Guadiana para quedarse con un 40,2% y una tendencia ascendente. De mayor importancia relativa resultan los ascensos del Guadalquivir y el Guadalete-Barbate. El Guadalquivir ha crecido 2,1 puntos y ya se sitúa en el 32,3% de su capacidad, mientas que el Guadalete-Barbate sube seis décimas y se recupera ligeramente hasta el 21,2%.

Este aumento de cifras no ha sido tan generalizado en la vertiente mediterránea, donde la mayor parte de la mejora llega de la mano del Ebro. En dicha cuenca las reservas han subido 4,4 puntos hasta alcanzar el 66,5%, las mayores cifras de la vertiente. El otro crecimiento del Mediterráneo está protagonizado por la cuenca de Cataluña, que mejora tres décimas hasta el 27,9%.

En cambio, han experimentado ligeras pérdidas el Júcar, que se mantiene en un 40,1%, y la cuenca Mediterránea Andaluza, que cae hasta el 21,9% y empieza a mostrar una tendencia preocupante. Esa preocupación ya resulta máxima en la cuenca del Segura, que volvió a perder medio punto semanal, se queda con tan sólo un 14,6% de su capacidad máxima y protagoniza, una semana más, las peores cifras de la Península.