Después de la ligera caída de la semana pasada, los embalses españoles han retomado la senda de recuperación que ha presidido la segunda mitad de octubre y de noviembre, creciendo 1,2 puntos en los últimos siete días. Así, en concreto, en esta última semana las reservas han crecido hasta el 44,6% del total, experimentando un crecimiento de 665 hectómetros cúbicos hasta alojar un total de 25.006 hectómetros.
Mapa de la evolución del agua en los embalses españoles
Las lluvias de esta semana continúan el camino de crecimiento con respecto a las cifras del año pasado donde, a estas mismas alturas de año, se obtenía una cifra más de 10 puntos inferior, más en concreto un 34,3%, dato tras el cual las sucesivas precipitaciones impulsaron el agua embalsada hasta el 44,9% con el que se cerró 2022.
La situación por cuencas hidrográficas
Las lluvias de estos últimos días no evitan la habitual división por ámbitos de la Península, con los cinco de la franja norte por encima del 75% de llenado frente a la escasez de reservas de la mitad sur y Cataluña, donde cinco ámbitos están por debajo del 20% e incluso Guadalete-Barbate ni siquiera alcanza el 15%.
La zona norte continúa con su situación de práctico llenado. En esta semana Cantábrico Oriental ha crecido 2,7 puntos hasta el 80,8% de su capacidad y el País Vasco aumenta 9,6 puntos hasta el 81,0%. El resto de cuencas de la zona experimenta ligeros descensos, más por desembalses que por pérdidas de reservas. Así Cantábrico Occidental cae cuatro décimas hasta el 76,7%; Miño-Sil pierde 1,6 puntos para albergar un 79,1%; y Galicia Costa pierde 2,3 puntos, manteniéndose aun así como el ámbito con mayor porcentaje embalsado con un 85,7% de su capacidad.
El crecimiento semanal también se manifiesta en las dos principales cuencas de la Meseta, aunque con distinta magnitud. Si bien el Duero crece cuatro décimas para situarse con un 56,6% del total, el Tajo crece 2,8 puntos para superar en porcentaje embalsado al Duero con un 58,9% de su capacidad.
De nuevo la situación es más alarmante en la mitad sur, hecha la excepción del Tinto, Odiel y Piedras, que crece 1,7 puntos hasta un 60,7%. Más allá de este ámbito el resto de números se sitúa en niveles muy bajos a pesar de sus moderadas recuperaciones. El Guadiana ha crecido nueve décimas hasta un 26,2% y el Guadalquivir se recupera cinco décimas hasta un 19,1%. El que no logra modificar su cifra embalsada, que permanece inalterada, es la cuenca del Guadalete-Barbate, con un 14,7% que supone la peor cifra de la Península.
La vertiente mediterránea también experimenta un cierto crecimiento semanal, pero en este caso está protagonizado de manera íntegra por el incremento del ámbito del Ebro, que experimenta un crecimiento de 3,5 puntos y se sitúa con un 57,3% de su capacidad. En una situación estable permanece el Júcar, que se mantiene otra semana sin variación con un 45,9%. Mucho más compleja es la situación en los otros tres ámbitos de la vertiente, que han sufrido pérdidas y ya se sitúan por debajo del 20% de su capacidad. Así la cuenca Mediterránea Andaluza pierde cinco décimas hasta el 19,8%; el Segura cae tres décimas hasta el 19,2%; y Cataluña pierde cuatro décimas y se queda con un 17,9% de su capacidad.
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