La llegada del calor tras las sucesivas borrascas que pasaron por la Península durante el mes de junio supone el arranque de la tendencia descendente de los embalses españoles que acontece cada verano. En los últimos siete días las reservas embalsadas han caído dos décimas, hasta situarse en el 47,2% del total.

 

Evolución del agua en los embalses españoles

 

Situación de los embalses en España por cuencas hasta el 27 de junio de 2023 / Mapa: EcoAvant.com Situación de los embalses en España por cuencas hasta el 27 de junio de 2023 / Mapa: EcoAvant.com

Tras un mes de junio con ligeras oscilaciones en torno al 47,4%, estas dos décimas de caída reanudan la tendencia descendente, con una pérdida semanal de 78 hectómetros cúbicos que deja las reservas en 26.472 hectómetros, cifras todavía por encima del porcentaje embalsado a estas mismas alturas de 2022: un 46,3%.

 

La situación por cuencas hidrográficas

 

Situación de los embalses y evolución del agua embalsada en datos a 27 de junio de 2023 / Infografía: EA Situación de los embalses y evolución del agua embalsada en datos a 27 de junio de 2023 / Infografía: EcoAvant.com

La ligera caída del total embalsado en esta semana esconde dos tendencias muy divergentes entre sí, las relativamente importantes caídas de la vertiente atlántica frente a la recuperación de la vertiente mediterránea: 293 hectómetros cúbicos menos en el Atlántico frente a los 215 hectómetros más del Mediterráneo.

A pesar de estas tendencias semanales, los embalses con mayor porcentaje de llenado son los de la vertiente norte, todos por encima del 70% y con las cifras máximas en el 92,0% del Cantábrico Occidental. Frente a estos números de práctico llenado, contrastan las paupérrimas cifras de dos cuencas del sur peninsular: el 23,6% del Guadalquivir y el 23,2% del Guadalete-Barbate.

Entre las cuencas de la vertiente atlántica norte, Cantábrico Oriental y Occidental han experimentado crecimientos de 2,7 y 1,2 puntos, respectivamente, para situarse con porcentajes de llenado superiores al 90%. En cambio, Miño-Sil y Galicia Costa experimentan ligeros descensos en torno al 1% que dejan a ambas cuencas con un 70,8% y un 76,2%.

Las importantes caídas de la vertiente atlántica toman protagonismo en las dos principales cuencas de la Meseta Central, donde el Duero pierde 1,1 puntos para quedarse con un 63,1%, y el Tajo cae 7 décimas para situarse en el 57,6% de su total.

Más dramáticas son las cifras en la zona sur, con caídas también generalizadas. El Tinto, Odiel y Piedras cae de la barrera del 70% para quedarse con un 69,9%, cifras que resultan excelentes si se comparan con las otras tres cuencas de la zona, que rozan la barrera del 30% en el caso del Guadiana (30,4%), y que caen bastante por debajo de dicha cifra en el Guadalquivir (23,6%) y el Guadalete-Barbate (23,2%), con las peores cifras de la Península.

Las caídas generalizadas de la vertiente atlántica contrastan con la recuperación de algunas cuencas de la vertiente mediterránea. Entre ellas destaca la recuperación de 2,9 puntos del Ebro, que se queda con un 53,6% del total, y la de las cuencas de Cataluña, que poco a poco supera su situación de sequía extrema y crece 6 décimas para llegar al 30,4% del total.

En cambio, otras cuencas de la zona mediterránea caen, perdiendo cuatro décimas el Júcar para quedar en un 57,9%, el Segura pierde una décima para quedar con un 36,2%, y la cuenca Mediterránea Andaluza desciende cinco décimas para situarse en un 33,2%.