Las autoridades de Botsuana han confirmado la muerte de cerca de 40 elefantes desde enero en una reserva del país, al tiempo que ha descartado el ántrax y una infección bacteriana como causa, en medio de los cientos de decesos de estos animales en el país desde 2020.
El Ministerio de Medio Ambiente, Conservación de Recursos Naturales y Turismo ha indicado en un comunicado que ha localizado los restos de 39 animales "tras las muertes misteriosas de elefantes en los alrededores de Mombo, en la reserva de Moremi".
"Los resultados preliminares han descartado el ántrax y una infección bacteriana como causa de la muerte y más pruebas de laboratorio siguen en marcha", ha señalado, antes de resaltar que no se ha encontrado mortalidad de cualquier otra especie en la zona.
Más de 300 elefantes fallecidos el año pasado
Asimismo, ha reclamado a la población que "no coja ni consuma carne de elefantes que encuentren muertos" y ha solicitado que informen a las autoridades sobre su ubicación, según el comunicado, publicado en su cuenta en la red social Facebook.
Las nuevas muertes se suman a los más de 300 elefantes fallecidos el año pasado en el delta del Okavango, que fueron finalmente achacadas a la ingestión de toxinas generadas por cianobacterias.
Botsuana acoge cerca de un tercio de la población de elefantes de África y en el delta del Okavango viven alrededor del 10% del total de paquidermos identificados en el país, donde el ecoturismo contribuye entre el 10 y el 12% de su PIB, sólo superado por los diamantes.