Un nuevo estudio sugiere que para el año 2050, la mayoría de los arrecifes de coral de todo el mundo corren el riesgo de sufrir agotamiento constante de uno de sus componentes: los sedimentos de carbonato de calcio. Algunos arrecifes ya están experimentando este estado, llamado disolución neta de sedimentos, que dificulta enormemente el crecimiento de los arrecifes de coral y, en consecuencia, afecta a la salud y la biodiversidad de los hábitats de los arrecifes.
Los resultados de este estudio revelan mejor cómo la intensificación de la absorción de dióxido de carbono producida por el hombre, o la acidificación del océano, afectará a uno de los dos procesos importantes para la supervivencia del coral. Las aguas superficiales donde los arrecifes de coral residen normalmente tienen concentraciones suficientemente elevadas de carbonato disuelto para que los corales calcifiquen sus esqueletos duros.
Acidificación océanica por actividad humana
La acidificación de los océanos provocada por el hombre se ha relacionado con niveles más bajos de saturación de carbonato de calcio y, por lo tanto, se espera que reduzca las tasas de formación de coral; sin embargo, los científicos aún no han descubierto cómo la acidificación de los océanos afectará a otro proceso importante para los corales, la disolución de los sedimentos de carbonato de calcio de los arrecifes de coral, que se acumulan durante miles de años y pueden ser el principal depósito de carbonato de calcio en los arrecifes de coral modernos.
Ahora, midiendo la disolución del carbonato de calcio en varios lugares del arrecife en el Océano Pacífico y Atlántico, el investigador principal Bradley Eyre y sus colegas de la Southern Cross University, en Lismore, Australia, descubrieron una correlación más fuerte entre la disolución del sedimento y la acidificación del océano que entre la acidificación y la calcificación del coral. De hecho, encontraron una reducción promedio en la calcificación de los corales desde tiempos preindustriales.
En sus análisis, cuatro de los 22 arrecifes ya han experimentado condiciones medias de agua de mar que promoverían la disolución neta de sedimentos, informan, y dada la tasa actual de acidificación, todos los arrecifes menos dos en las tres cuencas oceánicas deberían experimentar una disolución neta al final del siglo, según predicen los autores. Otros factores inducidos por el cambio climático, como el aumento de la temperatura de la superficie del mar y el blanqueamiento de los corales, probablemente aceleren la pérdida de los arrecifes de coral, agregan.