El Gobierno de España ha hecho un llamamiento a la Comisión Europea (CE) para que utilice el Pacto Verde (European Green Deal) como "la gran palanca para la recuperación económica de Europa tras la crisis provocada por el COVID-19", en palabras de la vicepresidenta cuarta y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera
En una carta hecha pública el jueves, firmada también por Austria, Dinamarca, Finlandia, Italia, Letonia, Luxemburgo, Países Bajos, Portugal y Suecia, los países solicitan a la Comisión que analice qué elementos de los que integran el Pacto Verde pueden ir adelantándose para acelerar una recuperación verde y una transición justa.
Los países consideran que el Pacto Verde europeo aporta soluciones para dar respuesta a la crisis económica provocada por el virus del COVID-19 "y transformar Europa en una economía sostenible y climáticamente neutra", según el Ministerio para la Transición Ecológica.
"Necesitamos ampliar las inversiones, especialmente en los campos de la movilidad sostenible, las energías renovables, la rehabilitación de edificios, la investigación e innovación, la recuperación de la biodiversidad y la economía circular", afirman los ministros firmantes.
Este conjunto de estados europeos recuerdan que aumentar el objetivo de reducción de emisiones a 2030, fortalecer el marco regulatorio europeo de lucha contra el cambio climático o reforzar los estándares ambientales, implica situar a los países europeos "a la vanguardia del nuevo desarrollo económico bajo en carbono".
Señalan además que la Unión Europea debe "enviar una señal política al mundo y a sus ciudadanos de que la UE liderará con el ejemplo, incluso en momentos difíciles como el actual, el camino hacia la neutralidad climática y el cumplimiento del Acuerdo de París".
Las lecciones del virus
Los países firmantes consideran que la crisis del COVID-19 manifiesta "la importancia de dar respuestas tempranas, de trabajar juntos y de manera solidaria, al igual que ocurre ante la crisis climática y ambiental".
"Los esfuerzos para frenar la crisis climática y ecológica deben ser prioridad en esos planes de recuperación. Es imprescindible que la UE mantenga su ambición para mitigar los riesgos y los costes de la inacción frente al cambio climático y la pérdida de biodiversidad", inciden.
La carta concluye que la protección y conservación de la biodiversidad deben de ser parte fundamental de la respuesta a la crisis global y medioambiental, "ya que son vitales para garantizar el bienestar y supervivencia de nuestras sociedades", sostienen.
Alemania, Francia y Grecia se sumaron posteriormente a los firmantes de la petición. Así lo han confirmado a Europa Press fuentes del Ministerio de Transición Ecológica y Reto Demográfico.