El gasto interno en Investigación y Desarrollo (I+D) en España alcanzó los 22.379 millones de euros en 2023, según la última Estadística sobre actividades de I+D publicada por el Instituto Nacional de Estadística (INE).

Sumario

 

Este dato refleja la creciente inversión en innovación y desarrollo científico en el país, aunque también pone de manifiesto las disparidades regionales en términos de gasto y financiación.

El gasto en I+D tiene un impacto directo en la competitividad de los sectores industriales y de servicios de España. En particular, la inversión en investigación permite desarrollar tecnologías emergentes, mejorar la productividad y contribuir a la sostenibilidad. Sin embargo, las diferencias en el nivel de inversión por comunidades también condicionan el desarrollo equilibrado del país.

Por ejemplo, en el País Vasco, la fuerte apuesta por la innovación ha consolidado su posición como líder en tecnología avanzada, mientras que en comunidades como Canarias o Castilla-La Mancha, la dependencia de sectores tradicionales como el turismo o la agricultura limita la capacidad para invertir en áreas tecnológicas.

 

Evolución de la inversión en I+D en España

 

Aunque el gasto en I+D ha crecido de manera sostenida en los últimos años llegando al 1,49% en el ejercicio 2023, España sigue estando por debajo de la media de la Unión Europea en porcentaje del PIB dedicado a estas actividades. Según los datos del INE, los esfuerzos por incrementar la inversión en innovación han comenzado a mostrar resultados, pero todavía queda un largo camino para alcanzar a países como Alemania, Suecia o Finlandia, donde la inversión supera el 3% del PIB.

El principal desafío para España es reducir las desigualdades regionales y garantizar que todas las comunidades puedan acceder a los beneficios de la inversión en I+D. Para ello, se requiere una mayor coordinación entre los gobiernos autonómicos y la administración central, además de incentivos para que las empresas privadas inviertan en regiones menos favorecidas.

Asimismo, el acceso a fondos europeos, como los destinados a innovación en el marco del programa Horizonte Europa, representa una oportunidad única para potenciar el ecosistema de investigación en España y reforzar áreas estratégicas como la transición energética, la digitalización y la biotecnología.

 

Mujeres investigadoras en I+D frente al total de personal del sector

 

En 2023, las mujeres representaron solo el 39,6% del personal investigador en España, un dato que refleja avances limitados en la inclusión de las mujeres en el ámbito científico. Aunque la cifra es considerable, sigue siendo insuficiente y evidencia que la brecha de género persiste de manera alarmante en la investigación. Este porcentaje no solo subraya la subrepresentación femenina en áreas clave de la ciencia, sino que también pone en evidencia la lentitud con la que avanzan las políticas de igualdad de género en el sector.

 

Desigualdad en el gasto por comunidades autónomas

 

A nivel regional, las comunidades autónomas con mayor gasto por habitante en actividades de I+D fueron el País Vasco, la Comunidad de Madrid y Cataluña, situándose como los principales motores de la innovación en España. Estas regiones concentran no solo gran parte de la inversión pública y privada en investigación, sino también un tejido empresarial que fomenta la innovación y la transferencia tecnológica.

En contraste, las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla, así como Canarias y Castilla-La Mancha, se ubicaron en los últimos puestos del ranking en gasto por habitante. Estas cifras revelan las dificultades de algunas regiones para consolidar estructuras de investigación robustas o atraer la financiación necesaria para impulsar proyectos de I+D.

 

El gasto en I+D en España por sectores

 

 

Personal ocupado en I+D en España por sectores

 

 

Fuentes de financiación de la I+D

 

La financiación de las actividades de I+D en España durante 2022, año previo al informe, provino mayoritariamente de dos sectores principales:

  • Empresas privadas: Representaron el 49,3% del total del gasto en I+D. Este porcentaje subraya el papel clave del sector empresarial en la promoción de la innovación en España, especialmente en industrias tecnológicas, farmacéuticas y de ingeniería.
  • Administración Pública: Aportó el 41,4% de los recursos destinados a I+D. Este esfuerzo gubernamental se centra en reforzar sectores estratégicos y en apoyar a las regiones con menos capacidad de financiación privada.

El resto de los fondos provino de instituciones sin ánimo de lucro, fuentes internacionales y fondos propios de las entidades investigadoras.

 

Perspectivas para el futuro

 

Con la creciente demanda de soluciones innovadoras para enfrentar desafíos globales como el cambio climático, la transformación digital y las pandemias, el papel de la I+D se vuelve aún más crucial. España, con su combinación de talento científico, empresas emergentes y apoyo público, tiene el potencial de posicionarse como un líder en innovación si logra superar las barreras estructurales actuales.

En definitiva, los 22.379 millones de euros invertidos en 2023 son una cifra significativa, pero su impacto dependerá de cómo se distribuya y utilice este presupuesto, así como de la capacidad del país para fomentar la colaboración entre el sector público, el privado y la academia.