Una encuesta llevada a cabo por Ipsos y el King’s College, en 28 países distintos a más de 28.000 personas, concluye que el 21% de los hombres considera que los estudios sobre las diferencias salariales entre mujeres y hombres son falsos. En el caso de España, el 25% de los hombres también piensa que son fake news las informaciones sobre la brecha salarial de género.
Pero más allá de la percepción que puedan tener uno de cada cuatro españoles, la brecha salarial de género en España es del 22%, tal como advierte la Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF), –que ha utilizado los últimos datos de la Agencia Tributaria (2019)–, la diferencia salarial entre mujeres y hombres está “retrocediendo a niveles del 2013, como consecuencia de la precariedad laboral originada por el covid-19: hemos retrocedido ocho años”.
Eva Fernández, secretaria de Igualdad de CSIF, pide que los partidos del Gobierno dejen de discutir: “Necesitamos un pacto político y social que es lo que la sociedad necesita para acabar con la brecha salarial”.
El Informe Mundial sobre Salarios 2020-2021, de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), analiza las tendencias recientes en materia de salarios, el contexto económico y del mercado de trabajo y el impacto que la pandemia ha tenido sobre los salarios a nivel mundial advierte de que en España el salario medio de las mujeres se ha visto reducido un 14,9%, durante la segunda mitad de 2020.
“121 años para acabar con estas desigualdades”
Por otro lado, los Técnicos del Ministerio de Hacienda (Gestha) a través de la quinta edición del informe Brecha salarial denuncian que “las mujeres aún cobran 5.000 euros menos que los hombres” de media al año. Y estiman que si bien en 2019 la brecha aumentó justo la mitad que un año antes, a este ritmo, que “harían falta 121 años para acabar con estas desigualdades salariales de género”. Gestha calcula que las mujeres tendrían que cobrar un 27,6% más para igualar el sueldo de los hombres, tal y como muestran los últimos datos de la Agencia Tributaria.
Por lo que también advierten sobre las diferencias salariales, especialmente significativas, en la Comunidad de Madrid donde las mujeres cobran 7.754 euros menos. Por el contrario, la autonomía más igualada en este sentido es Extremadura, donde las diferencias retributivas son de 2.770 euros.
Brecha salarial de género en la UE
Según el Parlamento Europeo la diferencia salarial de género es la que existe de media entre los ingresos brutos por hora de mujeres y hombres. Se basa en los salarios pagados directamente a los empleados antes de deducir el impuesto sobre la renta y las contribuciones a la seguridad social. Solo las empresas de 10 o más empleados se tienen en cuenta en los cálculos.
La brecha salarial de género en el conjunto Unión Europea (UE) asciende al 14,1% mientras que la más alta corresponde a Estonia (21,7 %), seguida por Letonia (21,2%), Austria (19,9%), Alemania (19,2%), Chequia (18,2 %), Eslovaquia (18,4 %) , Hungría 18,2%, Finlandia (16,6%) y Francia (16,5%) en 2019. En la zona de los porcentajes más bajos se encuentran Polonia (8,5%), Eslovenia (7,8%), Bélgica (5,8%), Italia (4,7%), Rumania (3,3 %) y Luxemburgo (1,3 %). En España la diferencia salarial entre mujeres y hombres era del 11,9 %.
El 30 enero de este año se aprobó una resolución, con 493 votos a favor, 82 en contra y 79 abstenciones en la que “instaba a la Comisión Europea a proponer medidas vinculantes sobre la brecha salarial de género y la transparencia salarial, que se apliquen tanto al sector público como al privado”.
“Feminización de la precariedad”
El informe Las empresas tienen que cumplir la Ley. La igualdad salarial cerraría las brechas elaborado por el sindicato UGT, va en la misma dirección que la de los técnicos de Gestha –aunque se queda más corto–, y considera que serían necesarios 43 años para que la brecha salarial de género desapareciera en España.
La vicepresidenta de UGT, Cristina Antoñanzas, ya señalaba en la presentación del documento –el pasado 18 de febrero– que esto se deduce de “la última brecha salarial, que corresponde a 2018, se sitúa en el 21,41% y es la más baja de los últimos once años, pero a pesar de ese descenso, las mujeres cobran de media al año, 5.726,30 euros menos que los hombres y si el descenso de medio punto en la brecha salarial en 2018 respecto a 2017”, según de los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE).
Por lo que, Cristina Antoñanzas, detalla que "los datos muestran que el salario medio anual en 2018 fue de 24.009,12 euros; sin embargo, el salario medio de las mujeres se estableció en 21.011,89 euros y el de los hombres en 26.738,19 euros”, y de aquí la diferencia “en detrimento de las 7.752.600 asalariadas y que asciende a más de 44.394 millones de euros, el 3,69 % del PIB de ese mismo año".
Para la vicepresidenta de UGT, Cristina Antoñanzas: "Es imprescindible ofrecer los recursos necesarios para el desarrollo de las medidas en materia de igualdad y derogar una reforma laboral que ha desequilibrado las relaciones laborales en favor de los empresarios y perjudica, en mayor medida a las mujeres, generando una feminización de la precariedad"
Un techo de cristal persistente
Equileap se dedica al estudio y los conocimientos sobre igualdad de género a nivel mundial en el ámbito laboral. La semana pasada trascendió su informe en el que analizaba 100 de las principales empresas con igualdad de género en todo el mundo. Las conclusiones en relación a la brecha de género no son tampoco nada halagüeñas, ya que solo 15 empresas de las analizadas a nivel mundial han conseguido erradicar la brecha salarial de género de sus estructuras.
Diana van Maasdijk, CEO de Equileap, señala una realidad muy preocupante: "No hay duda de que el Covid-19 ha tenido un impacto masivo en las mujeres en el lugar de trabajo en todo el mundo. De hecho, las investigaciones revelan que muchas mujeres están considerando dejar de trabajar”. Por otro lado, Van Maasdijk reconoce que “una legislación sólida conduce a una mayor igualdad de género”.
A su vez el estudio de Equilap destaca que la mitad de las organizaciones analizadas el 51% no cuenta con políticas para frenar el acoso pese al empuje del movimiento #MeToo y el 85% no publican información sobre su brecha salarial.
Aunque las mujeres representan el 37% de la fuerza laboral a nivel mundial, el techo de cristal es persistente y las mujeres solo representan un 25% en los consejos de administración, el 17% en puestos ejecutivos y en los el 24% en la alta gerencia, de acuerdo con los dato de Equilap.