El nuevo proyecto LIFE Olivares Vivos, coordinado por SEO/BirdLife, cuyo objetivo principal será acelerar la replicación de este modelo de olivicultura por las principales regiones olivareras de Europa y transferirlo a otros cultivos, como la vid, el almendro o los cítricos.

 

Recupera biodiversidad de flora y fauna

 

Según SEO/BirdLife, los resultados del anterior proyecto LIFE Olivares Vivos, que comenzó a finales de 2015 y finalizó el pasado mes de mayo, han demostrado que este nuevo modelo de olivicultura recupera biodiversidad tanto de flora como de fauna, permite la  disminución media del 22% en el gasto de fertilizantes y pesticidas en el cultivo de olivos y lo transforma en rentabilidad; por el pago por servicios ambientales (a través de los ecoesquemas y medidas agroambientales de la nueva PAC) y por el valor añadido que representa para los aceites producidos en los olivares vivos la recuperación de especies de fauna y flora (garantizado por el sello Olivares Vivos y su esquema de certificación).

El nuevo proyecto, que arranca este año y se prolongará hasta 2026, servirá para acelerar la replicación de este modelo por las principales regiones olivareras de España, Italia, Grecia y Portugal.

Además, en esta nueva etapa, se conocerá cómo se comportará la biodiversidad a más largo plazo, tras su puesta en marcha, y su conducta en escenarios de cambio climático, al estudiarse también en las regiones más áridas del área de distribución del olivar.

 

Conservación de la vida silvestre

 

"El olivar es el cultivo más importante para la conservación de la vida silvestre en Europa. Que Olivares Vivos acelere su expansión en las principales regiones olivareras de la cuenca mediterránea, punto caliente de biodiversidad, supone una apuesta global por recuperar el vínculo entre agricultura y naturaleza manteniendo como premisa los intereses de los agricultores", señala la directora ejecutiva de SEO/BirdLife, Asunción Ruiz.

Una de las metas de esta nueva fase será extender y replicar este modelo de cultivo del olivar, a través de fincas demostrativas y cursos formativos para agricultores, por las comunidades autónomas de Andalucía, Extremadura, Comunidad de Madrid, Castilla-La Mancha, Comunidad Valenciana y Cataluña. En la esfera internacional, se desarrollará también en el Alentejo, en Portugal; la Toscana y Apulia, en Italia y el Peloponeso y Creta, en Grecia.

 

Parcelas localizadas en zonas semiáridas

 

Asimismo, detalla SEO/BirdLife, se seguirá evaluando la biodiversidad y estudiando cómo evoluciona en cada una de estas regiones, una vez puestos en marcha los planes de actuación para rescatarla, o se analizará el impacto que el cambio climático tendrá sobre este modelo de olivicultura y el olivar, en parcelas localizadas en zonas semiáridas de las provincias andaluzas de Almería o Granada. Todo, para conforme avance el proyecto, iniciar también su aplicación sobre otros cultivos, como la vid, el almendro o los cítricos, puntualiza la ONG.

 

 

Consumidores, la clave

 

Ahora, todo este trabajo de campo y de investigación continuará acompañándose de acciones informativas dirigidas a los consumidores, el último pero indispensable eslabón de la cadena del proyecto pues, como apunta el delegado de SEO/BirdLife en Andalucía y coordinador de Olivares Vivos, José Eugenio Gutiérrez, "los consumidores son clave en todo el proceso, por su capacidad de elección en la cesta de la compra, siendo fundamental que reconozcan el sello diferenciador de los AOVE Olivares Vivos: el primer producto agroalimentario de Europa con un aval científico que certifica que para producirlos se ha recuperado especies de flora y fauna".