El recién iniciado 2017 ha sido declarado por la ONU Año Mundial del Turismo Sostenible para el Desarrollo. La resolución adoptada por la Asamblea General en diciembre de 2015 persigue el objetivo de "promover una mejor comprensión entre los pueblos, conducir a que se tome una mayor conciencia de la riqueza del patrimonio de las diversas civilizaciones y llevar a una mejor apreciación de los valores inherentes de las diversas culturas, contribuyendo así al fortalecimiento de la paz en el mundo".
El acto inaugural del Año Internacional tuvo lugar la semana pasada en Madrid, que acogía Fitur, la segunda mayor feria de turismo del mundo. "Cada día, más de tres millones de turistas cruzan las fronteras internacionales. Cada año, casi 1.200 millones de personas viajan al extranjero. El turismo se ha convertido en un pilar de la economía, un pasaporte a la prosperidad y una fuerza de transformación para mejorar millones de vidas. El mundo puede y debe aprovechar el poder de turismo como pretende hacer la Agenda 2030 para el desarrollo sostenible", dijo el recientemente elegido secretario general de las Naciones Unidas, Antonio Guterres, en su mensaje con motivo del año internacional.
La Organización Mundial del Turismo (OMT) –organismo de las Naciones Unidas que acoge a 157 estados miembros y tiene su sede precisamente en Madrid– es la encargada de desarrollar el programa y trabajar para lograr los objetivos del año internacional. "Con unas políticas adecuadas, el turismo puede contribuir a la igualdad de género, la conservación de los ecosistemas y de la biodiversidad y la protección del patrimonio natural y cultural, además de ofrecer soluciones a muchos otros retos apremiantes a los que se enfrenta hoy nuestro mundo", afirma la OMT.
El papel del turismo en la consecución de algunos de los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible aprobados el año pasado por la ONU es clave: se lo considera una eficaz herramienta para contribuir al Objetivo 8 -"promover el crecimiento económico sostenido, inclusivo y sostenible, el empleo pleno y productivo y el trabajo digno para todos"-, el Objetivo 12 -"consumo y producción sostenibles"- y al 14 -"conservar y utilizar de manera sostenible los océanos, los mares y los recursos marinos para el desarrollo sostenible". El principal de los retos de este documento es poner fin a la pobreza y el hambre en el mundo en 2030.
Mujeres y jóvenes
Las actividades del Año Internacional del Turismo Sostenible se desarrollarán sobre cuatro ejes: Campañas y sensibilización, Creación y difusión de conocimientos, Formulación de políticas y Capacitación y educación, con especial énfasis en esta cuarta en el empoderamiento de mujeres y de jóvenes. La OMT invita a gobiernos nacionales, regionales y locales, a instituciones y organismos públicos y privados a elaborar proyectos en esta línea.
Coincidiendo con el inicio del año internacional, diversos destinos han presentado en Fitur propuestas de turismo sostenible y responsable. Así, por ejemplo, Islandia pretende convertir la práctica totalidad de la isla en un parque nacional. Las tierras altas islandesas, que ocupan más del 70% de la superficie del país, se sumarían al parque de Vatnajökull, el mayor de Europa, que por sí solo se extiende por el 12% del territorio nacional. Y Argentina espera crear miles de puestos de trabajo alrededor del Parque Nacional Esteros del Iberá, de 1,3 millones de kilómetros cuadrados, el mayor del país, del que 150.000 hectáreas fueron donadas por el filántropo estadounidense Douglas Tompkins.
Canadá acaba de inaugurar The Great Trail, el más largo camino del mundo destinado a caminantes, ciclistas o jinetes, de 24.000 kilómetros de longitud), un sendero cerrado al tráfico motorizado que atraviesa todo el país, el segundo mayor del globo, desde Terranova, en el Atlántico, a la Columbia Británica, en las costas del Pacífico.
A una escala más local, los ejemplos son muchos, el emprendedor italiano Daniele Kihlgren ha rescatado del olvido el pueblo de Santo Stefano di Sessanio, de 70 habitantes, situado en la cordillera de los Abruzos, en la zona castigada por los ultimos terremotos, al comprar todas las casas vacías y convertirlas en un alojamiento respetuoso con el entorno. La Unesco y la OMT han empezado a certificar destinos con el sello Reserva Starlight, que garantiza que permiten una perfecta contemplación del cielo estrellado. En Anguila, una isla británica en el Caribe, un hotel proporciona agua potable a los habitantes de toda la isla de empleando únicamente energía solar. La fuerza del turismo puede cambiar muchas cosas. Para bien o para mal. Toca elegir.
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